Los trabajadores del Ingesa volverán a tomar la calle para
hacer oír sus reclamaciones. Ya lo ha anunciado el sindicato
USO en nombre del personal no sanitario del nuevo Hospital
Universitario. La intención de este sindicato es volver a
las concentraciones semanales en Loma Colmenar a partir de
la segunda quincena de septiembre, así como hacer extensible
la protesta a otros sindicatos y al personal sanitario.
Tras un verano marcado por una dialéctica de declaraciones y
desmentidos en los medios de comunicación, la protesta
sindical en el Instituto Nacional de Gestión Sanitaria (Ingesa)
tiene la intención de regresar a la calle.
Así lo ha anunciado a este periódico el delegado sindical de
USO, Javier Montero, que está liderando la protesta
principalmente del personal no sanitario. Según apuntó, la
intención de este sindicato es retomar las concentraciones
semanales a las puertas del nuevo Hospital Universitario de
Ceuta en la segunda quincena de septiembre. En realidad, el
calendario definitivo sólo está todavía a expensas de la
preceptiva autorización de la Delegación del Gobierno.
Los trabajadores vuelven a la calle porque, dicen, nada se
ha arreglado desde que se iniciaron las primeras protestas,
pocas semanas después de que comenzara a funcionar el nuevo
complejo hospitalario.
La sala de estar de los celadores se ha convertido en un
emblema del malestar del personal no sanitario. Montero
desmiente los argumentos del Ingesa de que disponen de hasta
treinta espacios donde estar. “Primero el jefe de los
celadores nos dijo que nos había habilitado un lugar en la
segunda planta, junto a la UCI, pero la promesa se ha
quedado en agua de borrajas. Luego nos han dicho que nos
estaban buscando hueco en el bajo, junto a los locales de
los sindicatos, pero tampoco sabemos nada”, señaló el
portavoz de USO, con la convicción de que sólo han sido
víctimas de estratagemas “para desmovilizarnos”. Y algo
parecido denuncian respecto a la climatización de
determinados departamentos.
“Los dispositivos de refrigeración que han puesto en la
cocina nos ha un poco de calor, pero seguimos padeciendo las
altas temperaturas. Y lo mismo cabe decir del almacén, si no
se puede climatizar, pues que hubieran bajado los techos”,
espetó Montero también en respuesta al Ingesa.
Pero la batalla común a prácticamente todos los sindicatos
de la junta de personal es la tantas veces alegada “falta de
personal” en el nuevo centro hospitalario. “Ayer (por
anteayer) no había por la mañana más que cinco celadores en
todo el hospital, cuando lo habitual sería que hubiera
catorce”, apostilló Montero.
En todo caso, desde USO no se descarta que se unan otros
sindicatos al calendario de movilizaciones, como Comisiones
Obreras, que pretende hacer la protesta extensiva a todas
las categorías profesionales del hospital.
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