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Menos mal que hoy, por el domingo,
la temperatura climática ha bajado algunos grados y ha
permitido que algunos ciudadanos disfruten del paseo por la
playa. Tenemos una sombrilla natural, las nubes, que tapa
por completo los fuertes rayos solares.
La quietud ambiental, ausencia total de vientos, se ve rota
por algunos movimientos sociales, formados por inmigrantes,
que llevan las cosas más allá de lo permisivo.
Pero escribamos del nuevo caso “diplomático” que acaba de
ocurrir.
Un grupo de activistas españoles, canarios por más señas,
estuvieron provocando a los marroquís con sus
manifestaciones y enarbolando banderas ajenas a su
nacionalidad.
Puede que consideremos el Sáhara Occidental como una nación
independiente, puede que lo consideremos como una provincia
autónoma de Marruecos, puede que sea un territorio de nadie
y que puede ser ocupado por el primero que lo pise…
De todas formas, manifestarse en un país extranjero siempre
trae consecuencias deplorables.
Lo que ha pasado a ese grupo de activistas españoles,
canarios por más señas, es un asunto privado por el que nada
pueden hacer las autoridades de Asuntos Exteriores. Ellos
mismos, los canarios, se han buscado tener el cuerpo
cubierto de magulladuras de las palizas recibidas de los
policías marroquís disfrazados de sahaurís.
¿A quién se le ocurre meterse en el centro de la olla en
ebullición? Está visto que nuestro país produce quijotes a
mansalva.
A pocos días de los incidentes de la ciudad hermana de
Melilla no está la cosa para que intervenga el ministro
Moratinos, lo que sería un desatino.
No entiendo a dónde quieren llegar los peperos con su
insistencia en que se presenten en el Parlamento, como
comparecencia, los ministros en activo para que les aclaren
los temas ajenos.
¿Es que ignoran, los activistas y de paso todos los
españoles incluidos los peperos, lo que a continuación
expongo?
Si cuando España ocupaba el Sahara, teníamos esclavizados a
los sahaurís que no podían acceder a los estudios. Eran los
sirvientes y las concubinas forzosas entonces. ¿Ahora
clamamos por sus derechos?
En la época colonial en que los europeos se repartían África
a mansalva, el actualmente denominado Sáhara Occidental
estaba habitado, precisamente, por nómadas marroquís que
necesitaban a los jenízaros del sultán moro para que velasen
por ellos.
La palabra sahaurí es un invento de los occidentales porque
nunca existió cuando la ocupación.
Si entonces no daban pena… ¿por qué ahora sí?
Ya estamos cansados de que jueguen con nuestros
sentimientos.
Debemos aceptar que cada pueblo luche por su independencia
sin injerencias interesadas.
Si no son capaces de defender lo que consideran suyo, sin
injerencias ni colaboracionistas por medio, malos
gobernantes serían una vez que obtengan esa independencia
conseguida con ayuda de terceros..
Ríos de tinta, ríos de declaraciones… yo me río.
Nadie tiene derecho a juzgar a un pueblo si luego se
desentiende por completo de él.
Preocupémonos por nuestros asuntos… cuando seamos todos
ricos, entonces, ayudemos a los demás. Pobres, con una
crisis galopante a nuestro alrededor… preocuparnos por los
demás no viene a cuento, digo a la cuenta.
Una última pregunta… ¿por qué tienen que ser los españoles,
los de a pie, quienes aporten ayudas a las ONG’s? ¿Por qué
no lo hacen las grandes empresas, con miles de millones de
beneficios, o los grandes bancos, con trillones de
beneficios?
Si lo hacen o lo han hecho, bueno es saberlo.
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OPINIÓN / LAS NOTAS DEL QUIM
