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Aunque las obras de remodelación
han acumulado cierto retraso, el Parque de San Amaro estará
listo para el ‘Día de la Mochila’, ofreciendo un aspecto
renovado para uno de los grandes pulmones de la ciudad
autónoma, emplazamiento inigualable para el esparcimiento de
los ceutíes y monumento natural en el que seguir el rastro
de la historia de la urbe. Sin duda una buena noticia para
los ciudadanos de Ceuta y, sobre todo, para los vecinos de
la barriada del mismo nombre que el parque, que han debido
privarse durante cerca de un año de celebrar en este espacio
natural muchas de sus actividades. Sin embargo, el
sacrificio ha merecido la pena y Ceuta podrá estrenar en
breve un espacio verde que le viene como anillo al dedo.
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OPINIÓN / EDITORIAL
