A partir de las entrevistas realizadas a las mujeres
transfronterizas para dicho estudio, el Centro Asesor de la
Mujer (CAM) ha detectado importantes acciones que podrían
mejorar y aumentar la cobertura del colectivo, aunque para
ello sería necesaria una ampliación de los recursos
económicos.
La prioritaria, establecer una red de trabajo entre
instituciones públicas y privadas que se sustente sobre una
base sólida que permitiese un mayor aprovechamiento de los
recursos existentes en la ciudad. Seguida esta herramienta
de la creación de una base de datos para conocer,
cuantitativamente, los perfiles y la problemática que sufre
el colectivo y que pudiese ser manejado por las entidades
que trabajen en red.
Para abordar los problemas desde el país de origen,
permitiendo mejorar las condiciones de vida de las mujeres,
el CAM apuesta por las conexiones con asociaciones de
mujeres o de carácter social del norte de Marruecos, y
ampliar, de este modo, los recursos en materia educativa,
fundamentalmente en lo que respecta a la enseñanza del
castellano.
Para atajar desde la raíz la violencia de género, el
organismo ve imprescindible el esfuerzo burocrático y la
cobertura jurídica para legalizar la situación de madres con
hijos e hijas españoles, así como de aquellas mujeres que
han sido víctimas de esta lacra. Y para combatir la economía
sumergida, la intención sería emprender una campaña de
sensibilización para la contratación de empleadas domésticas
que permita una mejoría en las condiciones laborales.
Y como último eje de actuación para incrementar la cobertura
de las transfronterizas, el CAM apuesta por la, elaboración,
por parte de entidades no gubernamentales, de proyectos
sanitarios destinados a este colectivo, que abarquen desde
la formación hasta la ayuda para medicamentos.
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