Espectacular la visita de José
María Aznar a Melilla. Para echarle cojones al foco del
conflicto fronterizo teledirigido. Pura pamplina y montaje
cutre de cuatro mangurrinos que deben querer dinero.
No hay nada mejor que poner sobre el tapete la lista de
supuestos agravios para sacar los cuartos a los españoles,
perdón, al Gobierno de España, rectifico, el Gobierno de
España desbarata dineros que vienen directamente del sudor y
del trabajo de los españoles. De esos mismos que pedimos la
incoación de Diligencias Previas en nuestros Juzgados a los
energúmenos que se han calentado la boca amenazando
gravemente a las mujeres policías españolas. Y como aquí no
hay huevos no se ha reaccionado destacando en la frontera
una plantilla íntegramente conformada por mujeres y
manteniéndola allí. Por supuesto con la presencia destacada
y solidaria de todas las ministras del ejecutivo, de esas
mismas que se pirran por los viajes exóticos de turismo de
caridad institucional. Pero ni una triste ministra para dar
la cara junto a nuestras policías. ¿Siguen ustedes las
tertulias de Intereconomía? Sí, esas de las que podría en
este mismo momento salir un Gabinete de Gobierno de primera
clase, tal es la categoría moral e intelectual de sus
participantes.
Si hoy alguien quiere saber la verdad no tiene otro remedio
que enchufarse a Intereconomía y acabar con los pelos como
escarpias de los horrores que dicen y que cuentan. Horrores
verdaderos porque no les interponen ni una puta querella.
Intereconomía y José María Aznar acudiendo a dar la cara y a
hacerse vitorear por las calles de Melilla, como, si se arma
en Ceuta, se hará vitorear por las calles ceutíes. Aznar,
que hizo el Master en política a costa de los españoles, ha
acabado convirtiéndose en un estadista de alcurnia. Si
mañana se presentara Aznar a las elecciones le votaban hasta
los socialistas y si se presentara Rodrigo Rato le votaban
hasta los antiglobalización.
Tipos abolengosos tenemos en esta derecha nuestra, que va
perdiendo el alo timorato de cara a la Nueva Transición,
vamos, que se ve a los nuestros de Génova 13 menos peperines-melindrines
y miajita más lanzados. Sin pasarse. Porque la Cospedal,
Soraya y las cuatro que están siempre porque no dejan que
venga gente nueva parida por congresos de primarias, tienen
el deber moral de interrumpir su amable asueto y alargarse a
las ciudades llamadas por el marketing sesentero “Soles de
España en África”. Los peperos tienen que estar aquí,
empezando por Rajoy que es un buen hombre, aunque tiene más
fallos que llevar la barba de un color y el cabello de otro
distinto y que tira a caoba, prodigios de los tintes L´Oreal.
A Rajoy siempre se le adelanta Aznar que, a fuerza de
practicar en los foros internacionales, ha perdido el
olorcillo a medroso e indeciso.
Buenísimo momento para que, el PP, de la talla de estadista
mientras nuestro Gobierno, ante la ira popular y la
incredulidad de los cinco millones de parados, suelta la
guita a Marruecos para conformarles. Y milagro será el que
no regalen a los mamarrachos de la Plataforma del carajo que
quiere “liberar” a dos ciudades de la UE como Ceuta y
Melilla, milagro será que, aparte de arrimarles unos
dinerillos, no les inviten a una semana en un hotel de tres
estrellas de Benidorm con derecho a hacerse una foto con
Belén Esteban. ¡Que curioso! Estos de ahora son
complacientes y cobardones con los malos y crueles y
vengativos con los “propios”. Observo como Rubalcaba agacha
la cabeza ante los agitadores y retira a las féminas de la
frontera. Y no he visto en ningún momento en el puesto
fronterizo donde nuestros policías son coaccionados y
amenazados, ese tipo de despliegue espectacular de policías
armados saltando de furgones, como cuando detuvieron al
despacho entero de Del Valle en la Operación Ballena Blanca.
¿Ustedes creen que para detener a la pobre Pantoja que no ha
hecho sino cumplir con el legítimo derecho femenino de
desplumar al querido, hubiera más despliegue de seguridad y
más parafernalia que en la frontera de Melilla?
Bueno, tampoco para enseñarse con promotores, concejales,
tonadilleras, ex alcaldes, abogados y notarios hacen falta
muchos cojones. Los cojones hacen falta para plantarse ante
los malos y hacerse respetar. Pero los malos acojonan y los
buenos, cuando van esposados ante las cámaras de televisión
y encima lloran por estar acojonados, esos dan mucha risa y
mucho “resgustillo represaliero”. ¿Y por qué el Gobierno no
delega a Aznar para que dialogue con Mohamed VI? ¿Y que van
a hacer los agricultores, pescadores, transportistas y demás
de mi Rif de mi alma si no les dejan vender en Melilla sus
productos? Porque tanto Ceuta como Melilla pueden ser
abastecidas por mar con un puente marítimo de barcos de la
Armada, pero los pobrecitos de allí se van a tener que comer
los boquerones de la Mar Chica, los ladrillos, el cemento y
las berenjenas, se van a arruinar. ¿Y por qué Rajoy no está
en Melilla y luego se planta en Ceuta a tomarse en La
Campana un café largo con leche del tiempo y uno de esos
pasteles que no los hay mejores en dos sitios: ni en España
ni en el extranjero (lo sé por experiencia) y luego se va a
darse una vuelta con nuestros policías?.
¿Qué dicen? ¿Qué el PP puede estar tras los alborotadores
fronterizos para mofarse de las consiguientes
reacciones-desastre de los socialistas? No, que va. El PP es
muy mirado con el sudado dinero de los españoles y no le
gusta utilizarlo para “apaciguar”. Los de Génova serás más o
menos lentos. Pero Aznar, Imbroda , Vivas y las mujeres
policías españolas son Hombres y Mujeres de Honor. La troje
de la mies de nuestra España. Oigan, ¿a que les queremos?.
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