Dos mujeres, ocupantes del vehículo siniestrado en el Hacho
al salirse en una curva y volcar, salieron ilesas en un
peligroso accidente del que quedaron al filo de caer al
precipicio. Bomberos y Policía Local acudieron al lugar de
los hechos sin que las dos víctimas tuvieran que necesitar
atención médica más allá del estado de nervios de la
conductora.
Un vehículo volcó ayer tarde, con sus dos ocupantes, en una
de las curvas cerradas de la carretera del Hacho en
dirección al Recinto, sin que se haya producido lesiones en
las dos mujeres, que salieron por su propio pie pese a que
el vehículo quedó al filo de caer al precipicio.
El accidente se produjo alrededor de las 19’00 horas. El
vehículo circulaba cuesta abajo por la carretera del Hacho
en dirección hacia el Recinto cuando en una de las curvas
cerradas del vial, “y sin saber cómo” la conductora se vio
sorprendida en mitad de la curva sin apenas tiempo para la
reacción. Un frenazo en seco no sirvió para evitar que el
coche se estampara contra los quitamiedos, sino todo lo
contrario, quedó sin control, patinando a causa de la
gravilla y volcando tras el impacto. El coche quedó
bocaarriba sujetado excasamente por los cañaverales y una
mínima malla metálica que limita la caída al vacío. Abajo la
costa próxima a la Potabilizadora en una pendiente escarpada
superior a los cien metros.
Bomberos y Policía Local atendieron a las ocupantes aunque
no tuvieron necesidad de recibir asistencia sanitaria. La
dos mujeres daban gracias por poderlo contar.
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