Reflexionar en relación a la
decisión del Ejecutivo ceutí de patrocinar con 5.000€ uno de
los premios que se entregarán en las Carreras de caballos de
Sanlúcar, trofeo “Ciudad Autónoma de Ceuta”, es hacerlo
sobre una competición hípica declarada Fiesta de interés
Turístico Internacional, que se celebra anualmente en las
playa de la localidad gaditana de Sanlúcar de Barrameda, el
mayor espectáculo de las playas del sur que datan de 1835
por tanto, las más antiguas de cuantas se celebran en
nuestro país.
En esta edición, el presupuesto supera los 600.000€, más de
170.500€ en premios repartidos en las 24 carreras previstas
a celebrar en un hipódromo natural de arenas de la playa
cuando el mar se retira entre las playas de Bajo de Guía y
las Piletas, donde participarán los mejores pura sangre del
país, bajo la atenta mirada de los más de 35.000
espectadores que se darán cita cada tarde. Debo puntualizar,
que estas Carreras son un importante reclamo turístico en el
que esta asegurada la presencia de los principales medios de
comunicación del país.
Por tanto, las críticas vertidas desde el partido socialista
de Ceuta a través de su secretaria de política autonómica,
Milagros García, en relación a lo que ella cataloga como un
despilfarro de los fondos públicos, deberíamos
circunscribirlas en la campaña de descrédito permanente
contra cualquier decisión que adopte el Ejecutivo local. No
obstante, debo puntualizar que una decisión como esta,
consistente en promocionar a nuestra ciudad como destino
turístico en un evento de estas características, es labor
prioritaria de una consejería cuyo objetivo principal es
precisamente mostrar los atractivos que Ceuta reúne en los
foros correspondientes por tanto, esta nueva iniciativa
debería ser aplaudida por quienes se empecinan en acusar al
Gobierno ceutí de inmovilismo en su gestión política.
En definitiva, una vez más, los ceutíes nos quedamos
perplejos al comprobar la incoherencia de una formación, que
un día critica a Juan Jesús Vivas de carecer de iniciativa
en su gestión política pero, al día siguiente también lo
critica cuando adopta una decisión consistente en
promocionar los atractivos de una Ciudad, que se ha
integrado por méritos propios en el consocio empresarial
especializado compuesto por las 25 localidades españolas más
importantes de este sector, la Asociación Española de
Estaciones Náuticas. Incongruencias de una responsable
política empecinada en la crítica e incapaz de ofrecer
alternativas en la gestión política de la ciudad.
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