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En mi primera reflexión sobre la
Fundación Ceuta Crisol de Culturas 2015 valoré muy
positivamente el apoyo mayoritario mostrado por los
diputados y diputadas de las diferentes formaciones
políticas con representación en la Asamblea al aprobar los
Estatutos de una Fundación, que desde sus inicios, ha
contado con importantes adhesiones de la sociedad civil
ceutí. También, compartí con ustedes mi afirmación en
relación a la falta total de compromiso de los miembros de
la primera formación en la oposición con un proyecto que
pretende reivindicar a nivel nacional e internacional los
valores, que caracterizan a una sociedad enriquecida por la
notable presencia en nuestro diminuto territorio de todas
las culturas que han dominado el mundo en los diferentes
periodos de la historia a través del homenaje a la fecha que
nos introdujo en la Edad Moderna.
Por tanto, no me equivoco cuando afirmó, que todos los
integrantes de esta formación así como, sus socios de la
coalición, Caballas, muestran una falta total de compromiso
con un proyecto que ha congregado voluntades de todas las
ideologías y creencias religiosas al recibir más de medio
centenar de adhesiones entre asociaciones, clubes y
federaciones deportivas, organismos públicos y
organizaciones religiosas. Circunstancia, que se reafirma
cuando dicha fundación recibe la aceptación como patronos de
la misma de la Delegación del Gobierno a través de su actual
Delegado, José Fernández Chacón, del Centro Asociado de la
UNED, del Instituto de Estudios Ceutíes y del Consejo
Económico y Social. Por tanto, un proyecto que recibe la
aprobación de todas las instituciones, administraciones e
incluso, del organismo que reúne a todos los representantes
socioeconómicos de la ciudad.
Una Fundación, que se asemeja a otras ya creadas en
diferentes puntos de nuestra geografía tales como, la que
conmemora los doscientos años de la proclamación en la
ciudad de Cádiz, de la primera Constitución española: la
Constitución de Cádiz de 1812 ó la creada en la ciudad
hermana de Melilla, con la intención de alcanzar el
nombramiento de esta ciudad como Patrimonio de la Humanidad
a través, de la divulgación, a nivel naciones e
internacional, de su extenso patrimonio histórico cultural.
Por tanto, nuestra ciudad aspira ha conseguir los objetivos
planteados al igual que otras localidades españolas de
nuestro entorno con el compromiso de todos los ceutíes.
Para lo cual, el Ejecutivo de la ciudad ya ha planteado las
primeras actuaciones encaminadas a realzar nuestro rico
patrimonio histórico cultural a través de la recuperación de
importantes zonas de la ciudad tales como, la zona
amurallada cercana al Castillo de San Amaro, el propio
Castillo, el lienzo de las Murallas Reales ubicado en las
cercanías de San Juan de Dios o la conversión en Museo del
Conjunto Monumental de la Puerta Califal situada en el
interior del Hotel Parador La Muralla. Iniciativas, que se
unirán a las ya realizadas en los últimos años así como, a
otros nuevos proyectos relacionados con esta materia, que
demuestra sin ninguna duda, el asentamiento en nuestra
ciudad de todas las civilizaciones que dominaron el mundo
conocido.
En definitiva, pese a las críticas vertidas desde algunos
sectores de la sociedad ceutí en relación a un más que
dudoso inmovilismo del Ejecutivo presidido por Juan Vivas,
las últimas decisiones adoptadas por este, demuestran la
falsedad de las mismas. Para lo cual, tan solo debemos
recordar entre otras muchas iniciativas emprendidas, la
incorporación de Ceuta a un proyecto turístico empresarial
de ámbito nacional, la Asociación Española de Estaciones
Náuticas, integrándonos en una red compuesta por las 25
localidades costeras más importantes del territorio nacional
o la creación de la Fundación mencionada. Ahora, solo
debemos esperar la incorporación inmediata al proyecto
iniciado de quienes no dudan en afirmar que su único
objetivo es el bienestar de todos los ceutíes, la coalición
Caballas.
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OPINIÓN / AL SUR DEL SUR
