La AD Ceuta sumó ayer dos nuevos jugadores a su ambicioso
proyecto para la temporada 10-11. El portero Nauzet Pérez y
el delantero David Arenas Torres se convirtieron en el
décimo y undécimo fichaje del remozado equipo blanco. David
Torres, que ha sido contratado por dos temporadas, es un
delantero de 24 años (nació en Alicante el 16 de junio de
1986) que el curso pasado brilló con luz propia en el
Ontinyent CF al que llegó en el verano del 2008 procedente
del Real Murcia ‘B’. Antes había jugado en el Alicante
juvenil, en el Alicante ‘B’ y en el primer equipo celeste
las temporadas 04-05 y 05-06. El nuevo delantero de la
Asociación destaca por su capacidad de trabajo, buena
técnica y capacidad goleadora. En el Ontinyent ‘explotó’ la
campaña pasada tras marcar 18 goles, catorce en la Liga
regular, tres en la fase de ascenso y uno en la Copa del
Rey. Toni Aparicio lo alineó en 43 partidos entre la Liga y
el play off y en dos de la Copa del Rey, por lo que disputó
45 encuentros oficiales. El entrenador del Ontinyent, que
apostó por los sistemas 4-2-3-1 y 4-1-4-1, siempre utilizó a
Torres en la punta de ataque, aunque se trata de un jugador
con movilidad (mide ciento ochenta y tres centímetros y pesa
76 kilos) que puede caer a las bandas.
Después de dos temporadas en el Ontinyent, la segunda
bastante mejor en el plano individual y colectivo, el
delantero alicantino quería cambiar de aires y tratar de
buscar acomodo en la Liga Adelante. La UD Salamanca y algún
otro club mostraron interés por sus servicios, pero
finalmente su fichaje no cuajó y la AD Ceuta le presentó un
proyecto atractivo por dos años que terminó convenciéndolo.
David Torres será jugador de la Asociación hasta el 30 de
junio de 2012 y llega a la Ciudad Autónoma dispuesto a
prolongar su idilio con el gol y sobre todo conseguir el
ascenso que se le escapó ‘in extremis’ en su anterior
equipo. El Ontinyent, tercero del grupo III, eliminó al
Guadalajara y al Éibar ganando los cuatro partidos y en la
última ronda tuvo contra las cuerdas a la AD Alcorcón. En el
último suspiro un gol de los madrileños dejó al equipo
valenciano sin el ascenso.
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