Sr. Presidente nos dirigimos a usted al considerar que sólo
el propio Presidente de nuestra ciudad puede aportar una
solución a un problema que se ha originado a raíz del
momento en que se considera, todo el territorio de Ceuta,
zona controlada de caza. A partir de éste. por todo lo que
esto supone, un grupo de cazadores, cada vez más numeroso,
decidimos crear un nuevo club deportivo de caza.
Neutralizar la nueva situación que se crea, contraria a la
propia Ley, donde rompe con una tradición de este deporte en
nuestra ciudad, la hace impracticable para algunas economías
menos pudientes, nos obliga a emprender algunas acciones.
Por lo tanto, es nuestra determinación conseguir la
restitución de las zonas de campeo y caza al estado original
tradicional de Ceuta. Somos conscientes que para esto tendrá
que pasar, forzosamente, por como decimos, devolver al
estado original tradicional, anulando la mencionada
calificación de zona controlada de caza actual. Para ello
hemos emprendido algunas actuaciones programadas, la
primera: vía contencioso administrativo, donde claramente
exponemos los motivos que, en base a derecho tenemos para
pedir la nulidad de esta calificación.
Una segunda actuación consistiría, en paralelo, en llevar el
caso mediante denuncia, al Defensor del Pueblo, por entender
que, además de lo legalmente recurrente, se dan
circunstancias donde se vulneran derechos de carácter
histórico y de tradición en pro de una nueva situación que
se crea y que daña a todos los ciudadanos en general en
favor de un monopolio.
La tercera actuación ha consistido en documentarnos a través
de los grupos de la oposición de las prebendas que recibe
del erario público el club deportivo de caza adjudicatario,
en forma de vehículo y talones al portador, por un acuerdo
para hacer desaparecer supuestos gatos y perros del monte,
dinero, al fin y al cabo, que ha servido para contratar a un
trabajador venido de a Península Ibérica.
Emprendimos, además contactos con la Consejería del área,
intentado reconducir la situación al mismo punto de nuestra
reivindicación. Tenemos que decir que, en una situación tan
innecesariamente compleja, avanzamos sobre la base de un
traslado de decreto que se nos entregó y que supuestamente
permitía el campeo de perros a los ciudadanos en general en
condiciones aceptables para nosotros pero que la realidad se
encargó de desvelar, por el conocimientos del propio
decreto, que deja patente que habíamos sido manipulados,
engañados y burlados.
Por consiguiente, es decisión de la ejecutiva de nuestra
sociedad, apelar a usted para que restituya esta situación
revocándola o enmendándola y podamos, cuanto antes, desistir
de las acciones emprendidas por nuestra parte, evitando así
sentencia judicial alguna o pronunciamiento del Defensor del
Pueblo.
* Es Presidente de la Sociedad de Caza de Ceuta
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