El Gobierno de Melilla pedirá formalmente en estos días a la
Fiscalía que actúe de oficio contra el secretario general
del PSME-PSOE, Dionisio Muñoz, y el presidente de Coalición
por Melilla (CPM), Mustafa Aberchán, por “insinuar” una
presunta prevaricación por los jueces de la Sección Séptima
de la Audiencia de Málaga, tal y como así lo destacó el
portavoz del ejecutivo melillense Daniel Conesa, quien
ofreció una rueda de prensa para ofrecer todos los datos a
los periodistas.
En rueda de prensa, el portavoz del Ejecutivo melillense,
Daniel Conesa, ha informado de que entre ayer y el
miércoles, la Ciudad Autónoma remitirá a la Fiscalía un
escrito acompañado de la grabación de las declaraciones que
Dionisio Muñoz hizo en solitario el 24 de junio, y las que
realizó éste en compañía de Mustafa Aberchán el 1 de julio.
El 24 de junio, Muñoz se mostró favorable de volver al
modelo judicial que se daba anteriormente en Melilla, al
considerar que eliminando la Sección Séptima de la Audiencia
Provincial de Málaga en Melilla se garantizarían sentencias
más jurídicas que políticas porque sería muy difícil ejercer
influencia sobre los magistrados.
Posteriormente, el 1 de julio, Aberchán dijo que su teléfono
móvil y el de Muñoz estaban “intervenidos por orden
judicial” porque comienza el proceso de la denuncia de CPM
contra el PP “por la utilización del poder público, como
vales de alimento, dinero, dependencias municipales e
intercambio de votos por correo”.
Asimismo, Dionisio Muñoz argumentó que el Gobierno local ha
puesto en marcha un mecanismo para acabar con cualquier
estrategia política que “produzca un cambio en el Ejecutivo
local” en las elecciones de 2011.
El portavoz de la Ciudad Autónoma ha considerado que estas
declaraciones son “gravísimas” porque se está imputando de
manera indirecta a los jueces en una serie de
irregularidades que pueden entenderse como “un delito de
prevaricación”, lo que supone, como mínimo, una injuria o
una calumnia.
Por esta razón, el Gobierno melillense considera que la
Fiscalía debería actuar de oficio contra Muñoz y Aberchán,
de los que ha dicho que son “absolutamente impresentables” y
que “han perdido cualquier atisbo de dignidad política y
cualquier capacidad de establecer un juicio mínima
racional”.
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