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Los dos partidos que conforman la oposición en Melilla, PSOE
y PCM, denunciaron ayer la actitud “dictatorial” del
presidente del Gobierno autonómico y de la Asamblea
regional, Juan José Imbroda, tras expulsar a un diputado en
el pleno celebrado el lunes. Los líderes de ambos partidos,
Dionisio Muñoz y Mustafá Aberchán han protestado
conjuntamente por la expulsión de Abdelrahem Sellam (CPM).
CPM y PSOE, los dos partidos que conforman la oposición en
Melilla, han denunciado la actitud “dictatorial” de Juan
José Imbroda, presidente del Gobierno autonómico y de la
Asamblea regional, que expulsó el lunes al diputado
Abdelrahem Sellam (CPM), que fue invitado a abandonar la
sesión tras acusar al Ejecutivo melillense de estar detrás
de un “pelotazo” urbanístico en el pleno del lunes pasado.
Según Muñoz, es la tercera vez que un diputado de la
oposición es expulsado de la Asamblea autonómica, algo que,
ha dicho, deja al descubierto la actitud “dictatorial” del
Gobierno y de su presidente.
El socialista señaló que el pleno ya estuvo precedido de la
polémica, ya que se celebraron previamente tres juntas
generales de las sociedades públicas, en las que no se
permitió el debate, motivo por el que se está estudiando la
impugnación de las mismas.
Más duro en sus críticas se mostró el cepemista Mustafa
Aberchán, quien ha aseverado que el Gobierno melillense se
quiere presentar como víctima cuando en realidad es el
“verdugo”.
Aberchán restó importancia a la utilización del término
“pelotazo”, ya que, según ha manifestado, es “la moneda de
identificación” del Gobierno melillense que “todos los días
practica la corrupción política”.
El líder de la oposición ha recordado que en los últimos
años se han suspendido tres plenos, en uno de los cuales la
justicia falló contra el Ejecutivo autonómico por considerar
que la sesión tendría que haber continuado.
Aberchán ha tildado al Gobierno de “corrupto” por distintas
acciones políticas desarrolladas en la ciudad y ha hecho
referencia a la imputación del presidente melillense en un
caso, en el que, según ha recordado el propio cepemista,
luego se decretó el “sobreseimiento libre”.
También ha acusado al presidente melillense de haber querido
“comprar” a un diputado de la oposición, al que
supuestamente se le pidió formar un Grupo Mixto, aunque no
ha querido dar el nombre del mismo.
Según han opinado los dirigentes de la oposición, el
Gobierno local buscó la confrontación e incluso la
provocación para motivar la expulsión de Sellam, quien se
sintió aludido ante una frase de Imbroda en la que decía que
a él “no le han registrado la casa”, ni tiene “un amigo en
Holanda”.
Por su parte, preguntado por si Sellam llamó a Imbroda
“ladrón” y lo acusó de “estar hinchándose”, Muñoz ha
respondido que en el momento que lo dijo los allí presentes
-los medios de comunicación tuvieron que salir- entendieron
que se refería a un “expolio” de los derechos democráticos
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declaraciones 
