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Un año y ocho meses de prisión y el pago de 157 euros fueron
las penas solicitadas por la fiscal para un hombre que fue
detenido en el embarque de pasajeros de la Estación Marítima
con 108 gramos de hachís en el bolsillo del pantalón. Por su
parte, la defensa apuntó al “consumo propio” por la adicción
a la sustancia manifestada por el imputado.
La representante del Ministerio Fiscal en la ciudad solicitó
ayer las penas de un año y ocho meses de prisión y el pago
de 157 euros para un hombre al que le imputó un delito
contra la salud pública, aunque el juicio tuvo que
celebrarse en ausencia del propio imputado. Por su parte, el
letrado de la defensa pidió la absolución de su cliente
entendiendo que la droga que llevaba el mismo, el día de los
hechos, “era para su consumo propio” debido a la adicción a
al sustancia que este presentaba, demostrada a través de un
informe del Instituto de Toxicología.
Según relató un agente del Cuerpo Nacional de Policía, en
calidad de testigo, los hechos tuvieron lugar el 28 de marzo
en la zona de embarque de pasajeros de la Estación Marítima.
“Nosotros estábamos allí destinados ejerciendo funciones
dentro del plan de prevención antiterrorista cuando vimos
que el acusado, al percatarse de nuestra presencia, salió
corriendo. Le temblaban las manos y la boca, y en el cacheo
que le practicamos encontramos la droga”, especificó.
Además, en el momento de su detención, “recibió constantes
llamadas y siempre decía que no podía subir porque estaba
con la policía, como si hubiese quedado con alguien”, añadió
el agente. En total, fueron decomisados 108 gramos de resina
de hachís que iban en el bolsillo del pantalón del imputado.
Tras la declaración la magistrada dejó el juicio visto para
sentencia.
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