El consejero de Economía y Empleo de la Ciudad Autónoma,
Guillermo Martínez, tildó ayer de “políticamente correcta”
la respuesta que la Comisión Europea ha dado al
europarlamentario de UPyD, Francisco Sosa Wagner, sobre qué
piensa hacer con la reivindicación ceutí de tener una aduana
comercial con Marruecos (nada, pues “la competencia es de
España”, ha asegurado) y manifestó con cierto mohín su
confianza en que en un futuro las instituciones comunitarias
presten más apoyo.
La respuesta de la Comisión Europea a la pregunta que el
eurodiputado español de UPyD, Francisco Sosa Wagner, le
trasladó sobre qué pensaba y podía hacer con la
reivindicación ceutí de contar con una aduana comercial no
ha sorprendido al Ejecutivo ceutí, que ayer conoció su
contenido a través de este periódico. “Se agradece el
interés del europarlamentario pero para nosotros no es
ninguna sorpresa este pronunciamiento”, dijo ayer a
preguntas de los periodistas el consejero de Economía y
Empleo, Guillermo Martínez, sobre una contestación en la que
las instituciones comunitarias dejan claro que “la decisión
de proceder a la apertura de una aduana, por parte española,
para las operaciones comerciales entre Ceuta y Marruecos es
competencia de España”.
Martínez reconoció que las conversaciones para propiciar el
paso de mercancías a través del Tarajal no pueden
inscribirse en “una relación bilateral entre la UE y
Marruecos, sino entre el Reino de España y Marruecos”. No
obstante, el consejero dijo que “sería oportuno y necesario
tener el apoyo de las instituciones comunitarias en esta
reivindicación pero la respuesta de Bruselas, como es
habitual, es políticamente correcta”. “En un futuro”,
terminó Martínez en la misma línea de esperanza, “esperamos
tener una respuesta que constate más apoyo pero en estos
momentos, es cierto, es el Gobierno de la Nación el que
tiene la competencia”.
Unión Aduanera
Sobre si la hipotética integración de Ceuta, todavía no
decidida, en la Unión Aduanera podría facilitar obtener tal
respaldo el consejero tampoco quiso echar las campanas al
vuelo: “Son cosas relacionadas pero no exactamente lo
mismo”, advirtió, “porque la entrada en la Unión ni
inhabilitaría ni garantizaría tener una aduana comercial”.
Martínez sí afirmó que “sería absurdo estar en la Unión y no
tener una aduana comercial” ya que desde su punto de vista
“si Ceuta formase parte de la Unión el sentido común, la
lógica y el Derecho Administrativo dicen que no podría haber
una aduana en Algeciras y que esta se debería implantar en
el Tarajal”.
A una semana de que concluya la Presidencia española de la
UE el representante del Ejecutivo ceutí también se refirió
al estado de la petición de gozar de un “tratamiento
singular” por parte de las instituciones europeas,
aparentemente paralizada: “Hemos reiterado al Gobierno de
España la necesidad y oportunidad de tener un reconocimiento
específico, pero este no es un momento en el que estén
abiertas las negociaciones sobre posibles cambios. Ese
melón”, dijo, “se abrirá en el segundo semestre, cuando se
empiecen a negociar los fondos europeos, y entonces habrá
que hacer valer nuestras peculiaridades”.
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