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Los animales domésticos se convierten a menudo en un
obstáculo para que sus propietarios puedan disfrutar de sus
viajes de vacaciones. Una circunstancia que deriva en un
aumento del abandono de mascotas en Ceuta de casi el
cincuenta por ciento, según la Asociación Protectora de
Animales. Y lo peor es que en la ciudad autónoma el repunte
de esta práctica comienza en mayo y se extiende hasta
septiembre.
El abandono de perros y gatos se está convirtiendo en una
práctica cada vez más común cada vez que llega el periodo
estival y las mascotas domésticas se convierten en un
incordio para los dueños que desean disfrutar de sus
vacaciones.
Así lo ha detectado la Asociación Protectora de Animales de
Ceuta, quien asegura que durante el periodo vacacional el
abandono de animales domésticos aumenta un cincuenta por
ciento en la ciudad. Es más, la veterinaria de la
asociación, Gabriela Larrea, explicó que si bien esta
práctica es bastante habitual en la mayoría de las ciudades
españolas, en Ceuta adquiere la pecualiaridad de comenzar
antes su ciclo. Según esta portavoz de la Protectora de
Animales, en la ciudad autónoma el abandono de mascotas
comienza en mayo, en plena primavera, y se dilata al menos
hasta el mes de septiembre.
Menos en la calle
Con todo, el endurecimiento de las sanciones por parte de la
Ciudad a los propietarios que abandonan a sus animales
domésticos en la calle está limitando esta práctica concreta
y ahora son más los propietarios que se dirigen directamente
a la perrera municipal para depositar sus mascotas y poder
continuar con sus viajes de vacaciones.
Una vez sometidos a observación en la perrera, se les
traslada al albergue de la Asociación Protectora de
Animales, donde se les busca otro dueño o se promueve su
adopción.
La única salvedad son los perros potencialmente peligrosos,
que en ninguno de los casos son trasladados al albergue de
la Protectora.
En este sentido, Larrea se refirió a las peleas de perro,
una práctica bastante extendida en algunos barrios de la
ciudad como El Príncipe, a pesar de estar rotundamente
prohibidas. De hecho, el adiestramiento de perros para el
ataque también está proscrito para los ciudadanos de a pie,
y sólo está permitido para cuerpos como el departamento
cinológico de la Guardia Civil.
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