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Hasta el próximo 13 de junio, la Dirección General de
Tráfico pone en marcha una nueva campaña intensiva de
vigilancia de motocicletas, en la que los agentes de la
Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil controlarán entre
otras variables las tasas de alcohol, la velocidad, los
adelantamientos incorrectos y otras infracciones en
circulación, el uso del casco, la placa de matrícula y la
documentación.
El objetivo de dicha campaña es vigilar e informar al cada
vez más numeroso colectivo de motoristas (12.741 personas
con licencia, entre motocicletas y ciclomotores en Ceuta) de
la necesidad de realizar una conducción responsable y
adecuada a la vía por la que circulan, respetando las normas
de circulación y estando al día en lo que a documentación y
seguro se refiere.
En Ceuta, durante los primeros cinco meses del año de las
2.210 denuncias por infracciones de tráfico, 130 han sido a
motocicletas y 163 a ciclomotores. De ellas, 106 han sido
igualmente por infracciones al artículo 118 del Reglamento
de Circulación, referido al no uso o uso indebido del casco
de protección.
En 2009, de las 7.668 denuncias tramitadas por la Jefatura
Local de Tráfico, 617 fueron a motocicletas y 953 a
ciclomotores. De estas 1.570 denuncias, 767 fueron
igualmente por la utilización indebida del casco homologado.
(Hay que tener en cuenta que no se incluyen las infracciones
cometidas dentro de la zona urbana, cuya tramitación es
competencia del Ayuntamiento.
El parque de motocicletas en Ceuta es de 8.686, mientras que
el de ciclomotores es sensiblemente inferior (4.055)
Campaña
A la vigilancia y control de las motos hay que sumar la
campaña de concienciación en los medios de comunicación.
Para ello, Tráfico ha elaborado un video informativo con
consejos sobre la conducción de este tipo de vehículos y
cuñas divulgativas que podrán escucharse en diferentes
emisoras de radio. También se podrán ver mensajes en los
paneles informativos de las carreteras, en los que se
recuerda a los motoristas lo vulnerables que son en la
carretera y la prudencia que tienen que tener en la
conducción.
Esta campaña se enmarca dentro de las acciones que se
desarrollan en el Plan de Seguridad Vial de Motos, puesto en
marcha a principios de 2008, como consecuencia del aumento
significativo de fallecidos y heridos graves por accidentes
de moto en los últimos años y cuyo objetivo era reducir la
siniestralidad en este tipo de vehículos.
La transposición de la Directiva Europea de acceso
progresivo a la conducción de motocicletas, la incorporación
de pruebas de circulación para la obtención de los permisos
de la clase A1 y A; examen teórico y práctico para el
Permiso de conducir AM; la elevación de la edad mínima de
acceso a ciclomotores a 15 años; el análisis de los puntos
de riesgo para motos en zona urbana y la elaboración de un
catálogo de soluciones o la realización de pruebas piloto
para la evaluación de nuevos diseños viales para mejorar la
seguridad de este tipo de vehículos son algunas de las
medidas llevadas a cabo durante los dos pasados años dentro
del Plan de Seguridad Vial de Motos y que han contribuido a
reducir, desde su puesta en marcha, un 33% el número de
motoristas fallecidos.
El casco, la vida o la muerte
El casco es el elemento de seguridad más importante del
motorista, llevarlo o no correctamente es la diferencia en
muchos accidentes entre la vida y la muerte. Todavía 7 de
los 76 motoristas muertos en España durante 2010 no hacían
uso del casco. La mayoría circulaban en motocicletas de
pequeña cilindrada. Es destacable el hecho de que el
porcentaje de no uso de casco en 2010 (10%) ha aumentado con
respecto a 2009 (3%), situándose en valores similares a los
de 2003.
Según el Manual de seguridad vial para responsables
políticos y profesionales “Casco” de la Organización Mundial
de la Salud, tres de cada cuatro motoristas fallecen a
consecuencia de heridas en la cabeza. Además, el riesgo de
sufrir una lesión cerebral se multiplica por tres, si el
conductor o pasajero de la motocicleta no lleva puesto el
casco y la probabilidad de salir ileso del siniestro aumenta
en un 20% si se hace uso del mismo.
Debido a la importancia del uso del casco en las motos y
ciclomotores, circular sin llevar el casco puesto es una
infracción grave, sancionable con 200 € y la retirada de
tres puntos del permiso de conducir.
Además, aquellos motoristas que circulen sin este
dispositivo de seguridad los agentes inmovilizarán la
motocicleta o ciclomotor hasta que el conductor venga
provisto de un casco.
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