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Los brotes de islamización continúan en la ciudad autónoma.
La presencia de Kamal Mustafa, iman de la mezquita de
Fuengirola, brazo poderoso de la corriente wahabí auspiciada
por los saudíes en España, preparó ayer el matrimonio de una
pareja ceutí residente en la zona del Polígono y más tarde
acudió a la mezquita de Mulay Mehdi a la hora del rezo donde
charló con varios musulmanes ceutíes. El polémico Iman es la
cabeza visible en el sur del plan estratégico islamizador de
Arabia Saudí sobre España.
El chej Kamal Mustafa, iman de la mezquita de Fuengirola
estuvo en la noche del sábado en la mezquita ceutí de Mulay
Mehdi, según ha podido saber EL PUEBLO. La presencia del
iman no pasó desapercibida en Ceuta.
El polémico iman de Fuengirola es un reconocido sunni wahabí
y uno de los brazos poderosos de la corriente saudí en
España que en los inicios de la década explicó cómo debía
pegarse a las mujeres sin dejar rastro.
Ayer el iman Kamal Mustafa estuvo en Ceuta para preparar la
documentación y oficiar un matrimonio con familiares en la
zona del Polígono y acudió, a la hora del rezo, a la
mezquita de Mulay Mehdi donde charló con algunos musulmanes
ceutíes.
Antecedentes de Kamal
Junto con las de Marbella y Málaga, la Mezquita de
Fuengirola fue financiada con dinero procedente de Arabia
Saudí, y por lo tanto pertenece a la corriente wahabí,
dominante en Arabia Saudí y de tendencias conservadoras.
La Mezquita de Fuengirola saltó ta la fama en 2000, cuando
su imam, Kamal Mustafa, publicó el libro ‘La mujer en el
Islam’ y fue denunciado por un centenar de asociaciones de
mujeres. El imam de Fuengirola fue condenado a un año y tres
meses de cárcel por incitar a pegar a las mujeres el libro.
Kamal aconsejaba cómo agredir físicamente a las mujeres sin
dejar rastro.
Medhi Flores, secretario de la FEERI en 2003 dijo en web
islam al respecto de lo ocurrido con el iman Kamal Mustafa
lo siguiente cuando el chej en lugar de retractarse,
continuaba batallando dialécticamente en favor de su
libertad de pensamiento: “El imam Kamal ha perdido el
juicio, dijo Flores. En vez de retractarse como se le
aconsejó desde el principio, lo que hace es intentar
convencernos a todos de que el Corán y la Sunna permiten o
ha permitido maltratar a las mujeres y que él lo único que
hace es dulcificar las palizas. Es muy triste que haya
optado por defenderse deshonrando al Islam y al profeta y
colocándonos a todos los musulmanes españoles en una
situación terrible. Suponte por un momento que un tribunal
español, en base a los argumentos de imam Kamal, sentenciase
una locura, a saber que la religión islámica permite y
ampara el maltrato de las mujeres. Automáticamente nos
pondría a todas las comunidades islámicas fuera de la ley,
fuera de la Constitución. Es algo que afortunadamente no
puede pasar por mucho que el imam Kamal se empeñe pero no
deja de ser preocupante que la defensa del imam se empecine
una y otra vez en demostrarlo. Así de esperpéntico he visto
yo el asunto”.
Pero no quedó ahí la cosa, Medhi Flores explicaba entonces
que: “Lo primero que vamos a hacer es expulsar al imam de la
FEERI y con él a todo imam que defienda las tesis de que en
el Islam se puede pegar a nadie. Se juzga a una persona que
presuntamente hace apología de los malos tratos a la esposa,
con independencia de su credo religioso. Así de simple”,
manifestó entonces Flores para intentar no mezclar al islam
con el pensamiento de esta única persona.
Arabia Saudi
En los inicios de 2000, España se ha convertido, aún lo
sigue siendo, una base de operaciones -un tablero de
ajedrez- donde se dirime el partido de la islamización. Ahí
juega un destacado papel Arabia Saudí. Su contrincante en
territorio español es Marruecos. Mientras tanto España sólo
observa los movimientos.
El plan saudí consiste en controlar el movimiento asociativo
musulmán y extender el fundamentalismo wahabí que Arabia
Saudí quiere implantar y extender entre la comunidad
musulmana de España el integrismo islámico wahabí, una de
las ramas fundamentalistas del islam, practicada por la
mayoría de los musulmanes de aquel país, donde está impuesta
como religión oficial desde la creación de ese Estado en
1932.
El primer paso es la fundación de un Consejo Superior de
Imanes que se encargaría de atraer y formar en el
proselitismo integrista a los actuales imanes moderados,
mediante comisarios religiosos wahabíes y abundante
financiación. Este consejo forma parte de la estrategia
saudí para controlar el movimiento.
España, teatro de operaciones
El Gobierno español posee información de estos planes
sauditas desde hace, al menos, ocho años, cuando se
detectaron los primeros movimientos para la constitución e
inscripción en el Registro de Entidades Religiosas del
Ministerio de Justicia de una asociación de imanes.
Mezquitas, escuelas...
Entre sus fines también se encuentra la promoción y la
creación de nuevas mezquitas, escuelas y bibliotecas, así
como la mejora de la situación particular y material de los
imanes.
En Ceuta, la figura de Laarbi Maateis es relevante en todo
este entramado que se viene fabricando a lo largo de la
última década.
La intención final está en el control doctrinal del
movimiento asociativo y para ello los saudíes tienen
previsto cursos científicos de religión musulmana en
diferentes centros islámicos, impartidos por una delegación
de quince sabios que permanecerían en España de seis a doce
meses con este objetivo, aunque algunos de ellos serían
contratados por alguno de estos centros y su misión sería la
de continuar ejerciendo como comisarios religiosos wahabíes.
Ese camino se viene empresndiendo en los últimos años. La
persona designada para dirigir los mismos es, según informes
que posee el Gobierno sobre la estrategia saudí en España,
Mohamed Kamal Mostafa, director e imán de la mezquita de de
Fuengirola, el de la encendida polémica en el verano de 2000
por justificar el maltrato a las mujeres en un libro. Kamal
Mustafa está considerado por la Policía española testaferro
de los saudíes en la zona.
Los informes en poder del Gobierno sobre las actuaciones
saudíes en España destacan el “incremento notable de sus
actividades” y en ellos se afirman que éstas van dirigidas a
alcanzar uno de sus mayores objetivos: “La implantación
entre los musulmanes que viven en España del islam wahabí
como forma de vida”.
“Estas acciones forman parte de una verdadera ofensiva, a
escala mundial, que, en Europa, se concreta en el triple
objetivo de conseguir la reislamización de los musulmanes de
los antiguos países del Este, la implantación del wahabismo
entre los inmigrantes musulmanes de la Unión Europea y la
conversión al Islam de los cristianos”, se citaba en el
informe de la Inteligencia española, publicado por un
rotativo nacional.
El imán de Fuengirola se postulaba como “cabeza visible”,
según los informes del gobierno español.
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