Los inicios del club Atlético de Ceuta se remontan al año
1956. La historia coincide con la independencia de
Marruecos, y el fin del Protectorado Español. Por aquella
época el máximo representante futbolístico de la ciudad era
la SD Ceuta, equipo que militaba en Tercera División, pero
sin embargo muchos aficionados ceutíes estaban acostumbrados
a disfrutar de fútbol de primer nivel, puesto que el
Atlético Tetuán, que la temporada 1954/1955 había debutado
en Primera División, llevaba varios años militando en la
categoría de plata del fútbol español. Fue una temporada
histórica para un club que, aunque tenía su sede y jugaba
sus partidos en Tetuán, contaba con el apoyo incondicional
de cientos de aficionados que cada domingo se desplazaban
hasta la localidad marroquí para presenciar sus compromisos
ligueros.
Especialmente esa temporada en la que el Atlético Tetuán se
enfrentó en partidos oficiales a equipos como el FC
Barcelona, Real Madrid o Athletic de Bilbao. Su paso por la
máxima categoría fue fugaz, puesto que esa misma campaña
descendió a Segunda División. La declaración de
independencia por parte de Marruecos provocó la desaparición
del Atlético Tetuán, pero a su vez generó el nacimiento del
Atlético de Ceuta, que se convirtió en fiel heredero de un
club modesto que alcanzó cotas, en un principio,
impensables. Después de la independencia de Marruecos, el
futuro deportivo del Atlético de Tetuán obligaba a sus
dirigentes a adoptar una decisión. Y tan sólo habían dos
vías. Por un lado inscribirse en la Real Federación de
Marruecos, y participar en sus campeonatos; y por otro,
fusionarse con un club ceutí, y de este modo, mantener su
plaza en Segunda División.
La primera opción, además de renunciar a la competición
española, provocaba que todos los jugadores de la plantilla
tetuaní, que suponía un importante activo para el club,
quedaran libres de forma automática, al causar baja el club
ante la Federación Española. La segunda de las alternativas
posibilitaría que Ceuta contara con un equipo en Segunda
División, basándose en el potencial y prestigio que el
conjunto norteafricano había adquirido en las últimas
temporadas. Por este motivo, José Benoliel propuso la
desaparición del Atlético Tetuán, y la creación de un nuevo
club que heredara su historia.
Fundación
El punto y final a una brillante e irrepetible historia,
daba paso a una nueva etapa. El Atlético de Ceuta nacía
gracias a la fusión del Atlético Tetuán y SD Ceuta.
Curiosamente, grandes rivales, futbolísticamente hablando,
en los últimos años. Pese a todo, ambos clubes se unían, y
permitían que el fútbol ceutí heredara la plaza del conjunto
tetuaní en Segunda División. Oficialmente el Atlético de
Ceuta nacía el 10 de julio de 1956, fecha en la que se
rubricaba el acuerdo entre todas las partes. José Benoliel
asumía la presidencia del club. José Pulido, desempeñaría
las funciones de secretario, mientras que Julio Gallardo fue
nombrado tesorero.
En el banquillo, Rogelio Santiago ‘Lelé’, quien había
dirigido al Atlético Tetuán en los últimos meses era el
elegido para sentarse en el banquillo del Atlético de Ceuta,
que además iba a contar con la gran mayoría de futbolistas
que componían la plantilla del cuadro norteafricano. Pasaron
a formar parte del equipo rojiblanco los siguientes
jugadores: Pedreño, Juanele, Martí-Gimeno, Giner, Maciste,
López, Jarque, Monti, Carreras y Riffi. Por motivos
económicos fueron traspasados Alarcón y Loli, reduciéndose
la deuda del Atlético Tetuán a 500.000 de las antiguas
pesetas.
En honor a los dos clubes fusionados se decidió que los
colores más representativos de ambos equipos formaran parte
de la equipación. Por ello, el Atlético de Ceuta vestía
pantalón blanco, camiseta rojiblanca y medias blancas.
Además se mantuvo el escudo del Ceuta, variando las siglas
SD (Sociedad Deportiva) por AC (Atlético de Ceuta).
Un día después de la fusión, el Atlético de Ceuta comunicaba
la Federación Regional la constitución de una comisión
organizadora que estaba formada por diez miembros –cinco
pertenecientes a la SD Ceuta y otros cinco al desaparecido
Atlético de Tetuán-.
Polémica
Los días posteriores a la fusión, que aparentemente se había
producido sin ningún tipo de problemas y con el consenso de
todos, se generó una importante polémica protagonizada por
José Benoliel y Julio Parres. El motivo de las diferencias
surgió, según recogía en sus páginas el ‘Diario de África’,
por los acuerdos adoptados por José Benoliel en calidad de
presidente de la comisión gestora, y su posterior
nombramiento como presidente del recién creado Atlético de
Ceuta.
El que fuera máximo mandatario del Atlético de Tetuán
remitió una carta al ‘Diario de África’ en la que calificaba
de “antirreglamentaria” la constitución de la junta
directiva. Julio Parres en ese comunicado publicado por la
prensa de la época explicaba que su intención era la
constitución de un equipo “fuerte y representativo por
entero de la población ceutí”, y por ello –reflejaba su
escrito- solicitó que la comisión organizadora estuviese
formada también por dos miembros de la Unión África Ceutí;
un representante de la Cámara de Comercio y otro del
Ayuntamiento. Según Parres, a esta petición se opuso el
presidente de la comisión gestora.
Para el ex presidente del Atlético de Tetuán, con la fusión
y creación de un nuevo club regido por la comisión gestora,
las directivas de ambos clubes “debían considerarse cesadas
y sus respectivas misiones habrían de limitarse solo y
exclusivamente a la liquidación de sus propios clubes para
hacer entrega uno y otro de todo lo activo y pasivo al
Atlético de Ceuta”. Circunstancia que según ese comunicado
no se había producido ya que la directiva de la Sociedad
Deportiva Ceuta “siguió reuniéndose y tomando acuerdos
totalmente ilegales, puesto que según constaba en la
Federación Regional, quien únicamente regiría los destinos
del nuevo club hasta la celebración de la Asamblea General
de socios, sería la comisión organizadora legalmente
constituida”.
El escrito remitido por Julio Parres también hacía
referencia a la situación económica del equipo tetuaní, que
según su ex presidente contaba con unas obligaciones de
medio millón de las antiguas pesetas, pero que el valor de
la plantilla duplicaba esta cantidad.
El 13 de agosto de 1956 la Federación Española de Fútbol
daba conformidad al nombramiento de José Benoliel como
presidente del recién creado club. La polémica surgida entre
ambos dirigentes no cesó0, ya que José Benoliel remitió un
nuevo escrito respondiendo a José Benoliel.
En el mismo exponía que había ofrecido la presidencia de la
comisión organizara al máximo mandatario del Atlético de
Tetuán, negándose éste –según el comunicado- a asumir el
cargo por motivos profesionales. José Benoliel también
aseguraba que se acordó que la asamblea de socios se
celebraría una vez se consolidara el proyecto de fusión,
justificando que las reuniones consideradas “ilegales” por
Parres, eran totalmente necesarias para la gestión y puesta
en marcha del club.
La fusión, legal
El hecho de que el Atlético de Ceuta ocupara la plaza del
Atlético de Tetuán en Segunda División, generó las protestas
de la Balompédica Linense, que en una nota de prensa
publicada por el ‘Diario de Cádiz’ en su edición del 21 de
julio de 1956 consideraba “ilegal” la fusión entre ambos
clubes. ¿El motivo? Según la Balona en el momento en el que
se produjo el acuerdo, el desaparecido equipo tetuaní
pertenecía a una nación extranjera, y por tanto “no se puede
admitir como legal –reflejaba el escrito- y bajo ningún
punto jurídico la fusión”. La Balompédica Linense que había
descendido esa misma temporada a Tercera División, pretendía
recuperar por mediación de esta queja formal su plaza. El
por aquel entonces presidente de la Federación Española,
Alfonso de la Fuente, calificaba de legal la fusión, y por
tanto la participación del club ceutí en Segunda División
Primer fichaje
Al margen de la polémica suscitada, el club ceutí
planificaba la temporada. La plantilla contaba con tan sólo
diez efectivos, por lo que el primer paso que había que dar
era completar el plantel. El primer fichaje del Atlético de
Ceuta -10 de julio de 1956- fue el del guardameta aragonés
Santiago Astarriaga Huarte, conocido futbolísticamente como
Astarriaga. Había militado la temporada anterior en la
Sociedad Deportiva Ceuta en calidad de cedido por el Jaén.
Tras el acuerdo alcanzado, firmó por dos temporadas. Días
después se cerraba la contratación de un nuevo jugador:
Aurelio Gálvez Pozo ‘Yeyo’, procedente del España Industrial
de Barcelona. Los fichajes continuaron produciéndose hasta
completar la plantilla que estaba formada por los siguiente
futbolistas: Astarriaga, Alonso y Rafa (porteros); Juanele,
Pedrito, Pedreño, Céspedes, Valero, Michel, y Surribas
(defensas); Riffi, Martín-Gimeno, Monti, Lopez, Sevilla y
Villar (medios); y Mora, Tello Yeyo, Noni López, Jiménez,
Carrera, Maciste, Nasio, Giner y Barrios (delanteros). Como
anécdota cabe destacar que José Benoliel mantuvo
conversaciones con el mítico ‘Zarra’ (ex jugador del
Athletic de Bilbao, internacional en 20 citas con el
combinado nacional y ‘pichichi’ de Primera División en seis
ocasiones). Tras su paso por la SD Indatxu, el presidente
del Atlético de Ceuta intentó su fichaje, pero finalmente
recaló en el Baracaldo.
El Atlético de Ceuta fue encuadrado en el grupo segundo o
grupo sur de 2ª División compuesto por los siguientes
equipos: Murcia, Hércules, San Fernando, Jerez, Málaga,
Betis, Mestalla, Tenerife, Extremadura, Granada, Badajoz,
España de Algeciras, Eldense, Castellón, Cádiz, Levante,
Córdoba, Alicante y Puente Genil. Se preveía una temporada
bastante complicada, ya que la intención de la Federación
Española era remodelar la categoría, reduciendo a dieciséis
el número de equipos por grupo, por lo que en esa campaña
1956/1957 descenderían los cuatro últimos clasificados.
La plantilla del Atlético de Ceuta inició la pretemporada el
7 de agosto de 1956. Aquel primer entrenamiento, en el que
estuvieron ausentes varios futbolistas, se celebró en el
estadio de Dar Riffien. Después de varias sesiones
preparatorias, el equipo rojiblanco afrontaba el 17 de
agosto su primer partido amistoso de la pretemporada en el
estadio de Menisla (Marruecos), ante el Club Riffien
Castillejos. Se disputaron dos tiempos de treinta minutos
cada uno. El encuentro que estuvo marcado por el fuerte
viento, finalizaba con victoria del cuadro caballa por seis
goles a uno. El Atlético de Ceuta presentaba el siguiente
once inicial: Astarriaga; Juanele, Valero, Pedreño;
Martí-Gimeno, López; Belizón, Yeyo, Giner, Noni y Maciste.
También jugaron Rafa y Sevilla. Belizón, Maciste, Sevilla,
Noni y Giner, por partida doble, anotaron los tantos
rojiblancos.
Dada la expectación que había despertado este nueva aventura
deportiva fue necesaria la remodelación del estadio Alfonso
Murube. El proyecto, que había que ejecutarlo de forma
inmediata ante la proximidad del comienzo de la competición
liguera, consistía en construir tres mil nuevas localidades
que ampliaran las gradas ubicadas detrás de las porterías,
mejorar los accesos e infraestructuras del estadio, y la
instalación de un nuevo terreno de juego.
Debut oficial
Una fecha importante en la historia del Atlético de Ceuta es
la del 9 de septiembre de 1956, puesto que aquel día el club
ceutí disputaba su primer partido oficial. La directiva del
conjunto rojiblanco, alentada por la afición, organizó una
serie de actividades previas al encuentro que sirvieran de
recibimiento a los numerosos aficionados procedentes de
Tetuán. Dos aficiones, que habían sido eternas rivales, pero
que sin embargo el destino les había aguardado un objetivo
común: apoyar al Atlético de Ceuta. Un destacado número de
aficionados ceutíes se desplazaron hasta Castillejos para
recibir al grueso de la expedición marroquí. Nadie quiso
perderse el debut oficial del equipo rojiblanco. Su estreno
en Segunda División fue inmejorable, puesto que los
atléticos doblegaban por un contundente cuatro a cero al
Extremadura C.F.
El primer once inicial en competición oficial del Atlético
de Ceuta estuvo formado por los siguientes futbolistas:
Astarriaga; Juanele, Pedrito, Pedreño; Riffi, Martín-Gimeno;
Mora, Yeyo, Noni, López y Maciste. El primer período
finalizaba con victoria local por dos goles a cero, gracias
a los tantos marcados por Yeyo (22’) y Mora (43’). En la
segunda parte, ambos jugadores volvían a ser protagonistas
al anotar Yeyo en el minuto 50 el tercer tanto; y Mora, en
el minuto 89, el cuatro a cero definitivo. La nota negativa
del partido fue la lesión sufrida por el defensa rojiblanco
Juanele, quien tuvo que ser retirado del terreno de juego en
el minuto 29. En las gradas del Alfonso Murube, que
presentaban un aspecto inmejorable, un grupo de aficionados
portaban una pancarta en la que se podía leer: “¡Fuera las
discusiones y a luchar como leones! ¡Aupa Atlético de
Ceuta!, en clara referencia la polémica suscitada entre los
dirigentes José Benoliel y Julio Parres. Ambos, además
sentado uno al lado del otro, presenciaron el partido desde
el palco.
En su primera temporada, el Atlético de Ceuta acabó en la
octava posición con 39 puntos (diecisiete triunfos, cinco
empates y dieciséis derrotas). El equipo rojiblanco anotó 53
goles y encajó 58.
A lo largo de su historia, que supera ya el medio siglo, el
Atlético de Ceuta ha militado once temporadas en Segunda
División (1956/1957, 1957/1958, 1958/1959, 1959/1960,
1960/1961, 1961/1962, 1963/1964, 1964/1965, 1965/1966,
1966/1967 y 1967/1968). En varias ocasiones disputó la Copa
del Generalísimo y posteriormente la Copa del Rey.
En Tercera División militó un total de nueve campañas. La
última, en la temporada 2006/2007. El equipo rojiblanco,
presidido por José Ríos Claro –actual presidente- regresaba
once años después a categoría nacional tras superar en la
eliminatoria de ascenso a la Peña Barcelonista, equipo
campeón de la regional melillense.
El regreso a Tercera División venía precedido de una
extraordinaria temporada en la que el cuadro caballa saldó
con triunfos los veinticuatro encuentros de liga.
Anteriormente, en la temporada 1993/1994 el Atlético de
Ceuta, presidido por aquel entonces por Francisco Cervantes
rozó la clasificación para la promoción de ascenso a Segunda
División B.
Sin duda, la mejor temporada en la historia rojiblanca fue
la campaña 1960/1961 en la que el Atlético de Ceuta disputó
la fase de ascenso a Primera División. Tras acabar la
competición liguera en segunda posición, los ceutíes se
enfrentaron al Elche CF. En el primer partido disputado en
el estadio Alfonso Murube, el Atlético de Ceuta se impuso
por un gol a cero, pero en el choque de vuelta los
valencianos vencieron por un claro cuatro a cero.
Actualmente el cuadro ceutí, después de su último paso por
Tercera División, y consumar su descenso a Regional
Preferente en la temporada 2006/2007, no está compitiendo en
ninguna categoría. Sin duda se trata de un club histórico,
añorado por muchos aficionados.
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