Es lo que se deduce de la carta
que Jorge Ruiz León envió al director de este medio, el
pasado miércoles, quejoso de mi columna del martes.
Jorge Ruiz León interpretaba nuestra columna del martes, a
su manera y, además, sin tirar piedras hacia su tejado, pero
disparando entre bambalinas a otros aspectos, muy distintos
de nuestra columna, sobre la carrera del pasado domingo.
Antes de nada y, tras agradecer el que nos haya leído, yo le
tengo que decir al señor Ruiz León, D. Jorge, que me agrada
que no esté de acuerdo con que se corte la Plaza de África
con los romeros del Rocío, o con algunas procesiones, por
ejemplo.
A mí tampoco me gusta y aquí, en repetidas ocasiones, he
mostrado mi disconformidad, con total libertad, porque no
tengo que agradecer ninguna prebenda, ni ningún carguito
oficial, para mí o para alguien de mi familia.
El señor Ruiz López aquí tiene espacio para mostrar esa
disconformidad, cuando quiera, ese día le cedo mi espacio
habitual, si es que se atreve a manifestar esas
disconformidades que apunta.
¿Se va a atrever a hacerlo?. Lo dudo mucho, y él y yo
sabemos por qué, especialmente ahora.
Y ya volviendo sobre mi columna del martes, tengo que
decirle que en esa dirección, con otros motivos, ha habido
alguna columna más, porque lo de la carrera ha sido un día o
serán cuatro, pero otras circunstancias, también, crean
problemas, en repetidas ocasiones, por lo que, para algo
están las hemerotecas, búsquelo y se enterará de que no sólo
es por una carrera, que ya dije que estuvo bien organizada.
Y hay más, el señor Ruiz León suele ponerse nervioso, cada
vez que se critica alguna prueba, en la que ha intervenido
él, de alguna manera. No es esta la primera vez.
A vuela pluma, recuerdo que allá por 1994 al haber criticado
yo, en la Cadena COPE, la llegada en una prueba que terminó
en Benítez, quiso estar y estuvo, en mi programa, para poner
las cosas en su sitio, haciendo entrar en directo a unos
colegas o conocidos suyos creo que desde Estepona o algo
así.
Yo les di entrada, sin más, porque ni entonces, ni ahora,
tengo nada, mas al contrario, desfavorable de esas pruebas y
estoy seguro de que si él no hubiera cogido el rábano por
las hojas se habría dado cuenta de que el punto de mira de
la critica no iba encaminado hacia la carrera. Usted sabe
leer.
En lo que, de ninguna manera voy a estar de acuerdo con el
señor Ruiz es en si había muchos o pocos clientes en el
Hotel La Muralla que fueran a salir con coche. Yo soy
cliente de ese establecimiento hotelero, por ejemplo. ¡¡Y
qué leches le importa a usted de los clientes que hay!!. El
cliente de un establecimiento entra o sale cuando quiere y
como paga, porque aquí en el Muralla se paga, en otros
sitios no sé, ni me importa, digo que como uno paga tiene
que exigir y buscar comodidad. ¿Me está entendiendo?.
Y otro tanto sucede con esas personas a las que el señor
Ruiz López tilda de domingueros, con el coche. No me incluyo
entre ellos, pero cada uno puede andar o correr, como usted
o yo, o puede ir con su coche, algo que a usted no debe
incumbirle, salvo que se metan en su terreno.
Pocas veces una carrera dio para tanto. Si hay respuesta le
aclararé más y si decide quejarse de otras cosas, seguro que
le voy a aplaudir. Claro que esas críticas pueden llevar
“recortes”, ya sabe..., y a lo mejor no se hacen.
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