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El presidente de la Ciudad Autónoma de Melilla visitó ayer
las obras que se están acometiendo en el Teatro Kursaal-Nacional
de la ciudad, el cual tiene previsto acoger las primeras
representaciones teatrales a partir del mes de enero del
próximo año, una vez queden finalizados los trabajos de
remodelación integral al que está siendo sometido.
El Teatro Kursaal-Nacional de Melilla acogerá las primeras
representaciones teatrales a partir de enero de 2011, una
vez que en diciembre de este año finalicen los trabajos de
remodelación integral al que está siendo sometido.
El presidente melillense, Juan José Imbroda, visitó en la
jornada de ayer el inmueble, que únicamente conservará la
fachada de su estructura inicial, una vez finalizada la
cubierta de aguas del espacio escénico.
Imbroda ha calificado el futuro teatro como “un monumento a
la cultura”, ya que posibilitará la representación de obras
y actuaciones que hasta ahora no podían darse en Melilla.
El Teatro Kursaal-Nacional contará con un escenario de 250
metros cuadrados, así como con un aforo de 837 personas, por
lo que se da un “salto cualitativo” con respecto a la
situación actual.
Además de ofrecer espectáculos, el edificio está pensado
para ser un centro de convenciones y congresos e incluye,
además, una sala de exposiciones, con lo que las
posibilidades son múltiples.
La reforma integral ha supuesto una inversión de 6,4
millones de euros, a los que hay que sumar otros 3,4 para el
equipamiento de la infraestructura.
Según Imbroda, en el nuevo teatro se va a rendir un homenaje
a tres melillenses que han destacado en el mundo de la
cultura como son Fernando Arrabal, José Tallaví y Juan
Guerrero Zamora.
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