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Unos minutos bastaron a los representantes del Gobierno
ceutí y los partidos representados en la Asamblea para
pactar ayer una declaración institucional de tres párrafos
que se elevará al Pleno del próximo jueves para pedir
“respeto” a Marruecos y agradecer al Estado y al resto de
los españoles su respaldo a la ciudad.
El presidente de Ceuta, Juan Vivas, los portavoces de los
tres grupos políticos con representación en la Asamblea
(Yolanda Bel, PP; Mohamed Ali, UDCE; e Inmaculada Ramírez,
PSOE), y el diputado no adscrito Mohamed Haddu Musa (IU)
rubricaron ayer una declaración institucional consensuada en
la que esgrimieron como “sólidos pilares” que sustentan la
españolidad de las dos ciudades autónomas “la Historia, la
Constitución, el Derecho y la voluntad de nuestros
ciudadanos”.
Vivas leyó ante los medios en el Salón del Trono del Palacio
autonómico el texto de la declaración, que será refrendada
en el Pleno de la semana próxima y en el que se deja claro
que esa “voluntad de ser y sentirse España” supera “las
diferencias ideológicas, los colores partidistas, las razas
y los credos”.
“Ceuta desea unas buenas y fructíferas relaciones con el
país vecino basadas en el respeto y la cooperación”, dice el
texto, “una aspiración que nunca debe condicionar ni limitar
la defensa de nuestra españolidad”. “Para ello”, concluye,
“contamos con la fuerza de la razón, con la firmeza de
nuestras convicciones y con el apoyo del resto de los
españoles, puesto en evidencia en la rápida reacción que en
el asunto ha tenido el Gobierno de la Nación”.
Vivas se congratuló por esta exhibición política de firmeza
que todos los partidos pactaron en unos pocos minutos. “Eso
es lo principal”, dijo, “transmitir a los ceutíes
tranquilidad y confianza con esta postura sincera que
demuestra que la defensa de la españolidad no depende de
partidos ni de ideologías”. Además, el presidente explicó
que aunque no ha recibido ninguna llamada del Gobierno
central para abordar este asunto sí ha “constatado” la
“rápida respuesta” a la posición marroquí de la
Vicepresidencia Primera del Ejecutivo socialista y de su
Ministerio de Asuntos Exteriores.
“Imperialismo trasnochado”
El presidente melillense, Juan José Imbroda, calificó ayer
de “imperialista” y “trasnochada” la reivindicación que
marroquí sobre Ceuta y Melilla, que a su juicio “carece de
cualquier tipo de fundamento”. A preguntas de los
periodistas, Imbroda dejó caer que Marruecos y su primer
ministro, El Fassi, deben de tener “algún problema interno”
que haya motivado la petición de “diálogo” para acabar con
esa presunta “ocupación”.
Para Imbroda, estas manifestaciones suponen una “injerencia”
que, además, es mucho más “lamentable” en el caso de
Marruecos, que es un país “amigo y aliado” de España.
“España ha sido el país que más ha hecho para que Marruecos
tenga en la Unión Europea un trato privilegiado y
preferente”, recordó Imbroda, quien resaltó la importancia
de que esto suceda con el fin de dar “estabilidad” a toda la
zona. Según el presidente melillense, la reivindicación
anexionista es un asunto “muy añejo y pasado” y no tiene
ninguna base porque ninguna de las ciudades “jamás” han sido
territorio marroquí.
Imbroda abogó porque las relaciones hispano-marroquíes no se
enturbien y porque este tipo de reivindicaciones “se
disipen”.
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“Las ciudades autónomas son tan españolas como Córdoba y
Sevilla”
El director de la Real Academia de
la Historia, Gonzalo Anes, aseguró ayer en declaraciones al
diario asturiano La Nueva España que “Ceuta y Melilla son
tan españolas como Córdoba y Sevilla, hace siglos que forman
parte de España, y eso es indiscutible”. “Marruecos
aprovecha cualquier situación de debilidad”, lamentó al ser
preguntado por la reivindicación de las dos ciudades
autónomas que el primer ministro marroquí, Abbas El Fassi,
volvió a poner en primera plana de la actualidad el pasado
lunes en el transcurso de su intervención en la Cámara de
Representates del país vecino, donde literalmente hizo un
llamamiento “a la amiga España” para que participe en “un
diálogo con Marruecos para poner fin a la ocupación de estas
dos ciudades marroquíes”.
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