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Delegación de Gobierno y Ciudad Autónoma suman esfuerzos en
coordinación para “sin restar importancia” a los problemas
de seguridad del Príncipe “que no son nuevos”, felicitar y
apoyar a las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad por su labor en
esa zona. La Junta Local de Seguridad sirvió para mantener
el plan de actuación conjunta e incrementar las actuaciones
que en la barriada realizan los tres cuerpos.
Los tres cuerpos policiales trabajarán de manera preventiva
en el Príncipe, se reforzará el plan que se sigue
específicamente en el barrio donde se delimita claramente
los objetivos y medios para la consecución de cada uno de
ellos y se incrementarán las actuaciones que se llevan a
cabo en la zona. Estas son básicamente las claves de la
Junta Local de Seguridad que, por el asunto de los últimos
acontecimientos en El Príncipe, se ha mantenido en la tarde
de ayer en la sede de la Delegacion del Gobierno y en la que
ha participado la Ciudad Autónoma.
El cumplimiento de las ordenanzas municipales y una
intervención social en el barrio son aspectos que también se
han tratado, y continuarán tratándose específicamente en
próximas reuniones a las que han quedado ambas
administraciones en convocarse.
Con los deberes hechos en sus carpetas [unos más que otros]
la larga mesa de reuniones de la Delegación del Gobierno
sirvió ayer para poner negro sobre blanco toda la verdad de
lo que ocurre en el barrio más conflictivo de la ciudad. No
es algo nuevo. Es volver a tratar sobre lo mismo y las
administraciones se han puesto duros deberes a cumplir ‘ipso
facto’ tanto en materia policial como en lo social.
Se ha hecho balance hasta la fecha de todo lo que se ha
desarrollado, que no es poco. Un total de 18 detenciones por
actos vandálicos es el cómputo presentado por el Cuerpo
Nacional de Policía desde que se acordó un especial
seguimiento al Príncipe con ocasión de la Junta Local de
Seguridad celebrada el pasado 18 de diciembre y en la que se
diseñó un Plan a cumplir, que ahora se ha tratado para
conocer la implicación de cada cuerpo policial a lo largo de
estos meses y sus resultados.
Tanto el Delegado del Gobierno como el Presidente de la
Ciudad, que han presidido conjuntamente la reunión, han
felicitado y apoyado a los Cuerpos de Seguridad por su labor
en esta zona, recordando además, aunque sin restarle
importancia, que el problema no es nuevo.
En este sentido, las dos administraciones han acordado
eforzar el plan donde se delimitan claramente los objetivos
y los medios a disposición para la consecución de cada uno
de ellos.
Este plan vendrá a mantener e incrementar las actuaciones
que se están realizando en la barriada por los tres Cuerpos
policiales, así como su presencia ‘in situ’ en el barrio,
una de las exigencias de los vecinos que en los últimos
tiempos habían incidido en esta idea.
Comprometidos
Tanto Delegación del Gobierno como Ciudad Autónoma se han
comprometido decididamente a que El Príncipe sea una
cuestión de importancia en la que pondrán especial celo las
dos administraciones con un seguimiento muy cercano.
El Plan, cuyos objetivos serán diseñados en una próxima
reunión técnica, incluirá actuaciones conjuntas entre
agentes de diferentes Cuerpos, que no sólo intervendrán
policialmente, sino también con una finalidad preventiva.
Ordenanzas Municipales
Además de la tarea que implica la seguridad ciudadana, el
orden público y la prevención, entre las medidas que se
llevarán a cabo será la de fomentar el cumplimiento de las
Ordenanzas Municipales. Asuntos como basura, obras ilegales,
ocupación de dominio público o venta ambulante se perseguirá
por los efectivos de la Policía Local.
Los vecinos piden también a gritos una regulación y
ordenación del tráfico en el barrio y critican el
“descontrol” de aparcamientos encima de las aceras y las
“carreras” de motoristas desprovistos de cascos por el
interior de sus calles.
Vandalismo
De la reunión se deduce una mayor implicación de las
administraciones en todos los ámbitos para prevenir y
enfrentar los actos vandálicos con medidas concretadas que
servirán para mayor diligencia en las resoluciones
judiciales. Un menor de entre 16 y 18 años ‘cazado’
apedreando acabará -con las irrefutables pruebas que han de
presentarse- en el centro de Punta Blanca. Un adulto inmerso
en este tipo de acciones, se enfrentará a cuatro años de
cárcel. En cualquier caso, los padres de los menores serán
responsables subsidiarios por los daños que su hijo haya
ocasionado.
En lo social
Importante acción es la parte social. De eso también se
habló en la reunión. De hecho, en próximas fechas se
convocará otro encuentro dedicado exclusivamente a
intervención social, que será objeto de evaluación y en la
que se pondrá sobre la mesa lo ya desarrollado más el
implemento de acciones que hayan de ser necesarias entre los
residentes del barrio.
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