La auditoría interna de la Atención Primaria en Ceuta
encargada por el Ingesa tras las denuncias y quejas que han
venido planteando los sindicatos desde el pasado otoño fue
presentada ayer por la directora general del organismo
gestor, Sara Pupato, a los trabajadores y los medios de
comunicación. La auditoría, que ha servido de base para el
plan de mejora bianual que también fue presentado ayer,
niega que la Atención Primaria en Ceuta padezca ninguna
sobrecarga asistencial pero apunta falta de planificación de
la actividad programada en beneficio de las consultas y la
atención de la demanda.
La directora general del Ingesa, Sara Pupato, acompañada del
subdirector general, Asís Jové, visitaron ayer Ceuta para
presentar la auditoría interna realizada sobre la red de
Atención Primaria. Una iniciativa que, como admitió Pupato
ante los medios de comunicación, había venido motivada por
las denuncias sindicales y la inadecuación entre “la
situación real” de la Atención Primaria y algunos datos que
habían ido trascendiendo.
La presentación de los datos de la auditoría y del Plan de
Mejora de la Atención Primaria, con vigencia para los dos
próximos años, fue más escueta para los periodistas que para
los trabajadores. En ambos casos la auditoría extrae como
primeras conclusiones que “los centros de salud de Ceuta
tienen una estructura suficiente y adecuada para desarrollar
sus funciones, con algún elemento de mejora” y que “la
población adscrita a cada profesional en términos generales
es adecuada y las ratios de tarjetas sanitarias por
profesional se ajustan a la media del Sistema Nacional de
Salud”. Es decir, que no existe sobrecarga asistencial.
Sin embargo, la auditoría sí aprecia que “la actividad
fundamental está basada en la consulta con poca
planificación para otras actividades de los Equipos de
Atención Primaria (sesiones clínicas, elaboración de guías
clínicas, discusión de casos, reuniones con Atención
Especializada...).
A muchos sindicatos no les gustaron unas deducciones que
parecían dejar entrever que el personal no trabajaba en las
dos horas destinadas a actos programados. “Dejan cinco horas
para consultas pero el tiempo medio que adjudican por
paciente a cada médico de familia es de 5,6 minutos y a cada
pediatra de 7,6. Sin embargo, no se puede atender a los
pacientes en este tiempo y las consultas se alargan más allá
de las cinco horas”, apunto la presidenta de la junta de
personal y delegada de SATSE, Elisabeth Muñoz.
La enfermera criticó también que sólo se tenga en cuenta las
tarjetas atendidas y no la población flotante y que se hayan
comparado los datos de Ceuta de 2009 con los del Sistema
Nacional de 2007. Con todo, según Muñoz, el Ingesa habla de
1.563 tarjetas por facultativo en Ceuta y 1.427 en el SNS, y
además de dos años antes. En pediatría la comparación es de
1.162 y 1.039 tarjetas, respectivamente. El número de
tarjetas atendidas por enfermera es de 1.760 y 1.668,
respectivamente.
Sin embargo, la frecuentación, esto es, el número de
consulta por habitante y año es inferior, lo que la junta de
personal lee como un buen dato porque indica la conformidad
de los pacientes con sus primeras consultas.
La presión asistencial (pacientes por médico y día), era en
Ceuta en 2009 de 36,34 y en el SNS en 2007 de 35,91 para
médico de familia; para pediatras 22,22 y 24,11,
respectivamente; y para enfermería 18,43 y 21.
El informe presentado a la prensa también admite
“insuficiente coordinación con Atención Especializada, sin
existir actividades conjuntas”, “insuficiente explotación de
los sistemas de información”, “problemas organizativos en
las actividades del 061 y SUAP” y problemas de comunicación
interna.
Respecto a la implantación de la receta electrónica, que
aligeraría las consultas de pacientes crónicos que sólo
acuden a recoger su tratamiento, Pupato indicó que el Ingesa
ensayaría su primera experiencia piloto en el tercer
trimestre.
Colapso del SUAP
La reunión dejó las centros de salud con el mínimo personal
para urgencias y muchos de los usuarios que vieron anuladas
su citas empezaron a colapsar el Servicio de Urgencia de
Primaria.
|
Pupato asegura que la única queja de los usuarios es el
tiempo que se tarda en obtener una cita
La metodología empleada para
realizar la auditoría ha consistido en entrevistas con
equipo directivo y responsables del equipo de Atención
Primaria, recogida sistemática de información en los centros
de salud, explotación de los indicadores a través del
sistema de información del Ingesa, así como de la
documentación aportada por los responsables de los centros
con las fortalezas y debilidades de cada una de las
unidades. La directora general del Ingesa, Sara Pupato,
señaló que también se había contado con una encuesta a los
usuarios que revelaba que más del 80 por ciento se encuentra
satisfecho con la asistencia que recibe de la sanidad
pública. Con excepción del tiempo que han de esperar para
obtener cita previa y acceder a la consulta demandada.
Pupato resaltó que toda la auditoría se había realizado
conforme a determinados protocolos y que ha servido, junto a
las estrategias determinadas por el Consejo Interterritorial
de Salud, para elaborar el plan bianual de mejora de la
Atención Primaria en Ceuta.
|