La cosa no anda my bien que
digamos en Grecia, donde la UE ha tenido que acudir al
rescate, con miles de millones de euros para salvar su
paupérrima economía, que no es por señalar, porque está una
jartá de feo pero que, aproximadamente, viene a estar como
la mía ¡Que ya es decir!.
Las decisiones que ha tomado el Gobierno griego para tratar
de salir de este caos económico no han sido, por supuesto,
del agrado de pueblo griego, que se ha tirado a la calle en
huelga y manifestaciones contra esas medidas, que aunque son
las únicas que se pueden tomar, son impopulares.
Desgraciadamente, estas manifestaciones y esas huelgas, han
dado un resultado, a estas alturas, de tres muertos en los
enfrentamientos mantenidos por le pueblo y la policía. Y
como siempre los muertos pertenecen al pueblo. Es lo que,
por desgracia, suele ocurrir en estas huelgas y
manifestaciones.
La pregunta que se puede hacer es, simple y llanamente, ¿se
podrían haber tomado otras medidas para salir del caos
económico en la que esta sumida Grecia?. La contestación, a
ello, la podrían dar todas esas mentes pensantes que manejan
los números.
Que duda cabe que de poderse haber tomado otras medidas
menos impopulares, se habrían podido evitar todas esas
huelgas y esas manifestaciones que han dejado, en las calles
de Grecia, tres cadáveres sobre el asfalto.
La perdida de esas tres vidas, es lo que más se puede y se
debe lamentar de toda esa situación que está viviendo el
pueblo griego. Y que ojala, no vuelva a tener, en sus
calles, más cadáveres sobre el suelo.
En Grecia ocurren cosas raras, fenómenos casi paranormales.
Ahí están, según dicten los entendidos en la materia, esos
60.000 mil griegos que, aunque muertos y enterrados, siguen
cobrando una pensión de jubilación. O esas 320.000 personas
que, a pesar de estar perfectamente sanas, ingresan
mensualmente una pensión de invalidez de papá Estado.
Bueno y lo que ya no es para tomárselo en serio es que,
Grecia, tenga un estadio de críquet que sólo, al parecer, lo
practican 10 personas en todo el país. Fue construido para
los Juegos Olímpico de 2004 y esto es, sin pensárselo dos
veces, un ejemplo del enorme despilfarro que se cometieron
en este evento deportivo.
Todas estas cosas, más otras que añadir no de menos
importancia, nada es de extrañar que, Grecia, se encuentre
sumida en el caos económico en el que se encuentra, por
culpa de unos mal gestores que son, en indefinitiva, los que
han llevado al país heleno a esta situación y, para sacarla
de la misma, ha tenido que acudir en su ayuda la UE,
aportando 110.000 millones de euros, como el que no quiere
la cosa.
Los griegos se han lanzado a la calle para protestar por las
medidas tomadas para salir de la crisis. Unas medidas que
afectan en gran parte, por no decir en su mayor parte al
pueblo llano, que no tiene culpa de nada de la mala
administración que han llevado a cabo los componentes de su
gobierno. Y como siempre pasa, serán los mismos, el pueblo,
el que tenga que pagar la incompetencia de su Gobierno.
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