El Gobierno ceutí que preside Juan Vivas y Comisiones
Obreras están buscando “una salida” para los cientos de
parados que cada día se manifiestan por el centro de la
ciudad desde el pasado 1 de febrero con el objetivo de
propiciar su entrada en los Planes de Empleo, programas de
seis meses de duración financiados por el Estado, de la
Administración local. El sindicato, que respalda las
movilizaciones pese a las críticas que por una presunta
“manipulación política” han dirigido a estas marchas el PP y
el PSOE, cree que de lograrse ese propósito las
manifestaciones podrían terminar a corto o medio plazo.
Vivas y Aróstegui, que tras meses sin hacerlo mantuvieron
una entrevista personal y privada el pasado lunes,
acordaron, según explicaron fuentes cercanas a ambas partes,
estudiar la forma de propiciar la contratación de
desempleados con el perfil de los manifestantes (mayores de
45 años con familias a su cargo y antigüedad media en las
listas del INEM), aunque el Ejecutivo ceutí insiste en que
no adoptará “ninguna medida ni a favor ni en contra de las
personas que están movilizadas”.
Este propósito choca, sin embargo, con los criterios
aprobados la semana pasada por la Comisión Ejecutiva
Provincial del INEM para seleccionar al personal que entrará
en dichos programas, que priman la carga familiar y la
antigüedad en el paro.
|