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No se si ustedes serán
telespectadores asiduos al programa que presenta Pilar Rubio
“Mira que baile”, antes “Mira Quien Baila” emitido por la
primera. Si no lo son, pues les explico de qué va el asunto,
porque tengo la mala suerte de ver todo lo que se programa
en las distintas cadenas televisivas, de la misma forma que
me leo todo cuanto cae en mis manos, aunque sea propaganda
de los supermercados. Soy así. No lo puedo remediar.
El programa va de reclutar a varios famosos, algunos más que
famosos son famosillos del tres al cuarto, y hacer un
concurso de baile con ellos.
Cada uno de ellos participa defendiendo una causa justa,
puesto que los diez mil euros con los que se premian, cada
semana, al ganador van a parar a una ONG o a otra entidad
benéfica.
Pasadas unas semanas se van eliminado, cada una de ella, a
uno de los participantes, hasta llegar a la final con un
sólo ganador. Hasta aquí nada que objetar pues, además, el
programa es entretenido.
El programa tiene un coreógrafo que es Poti, personaje
entendido en la materia, que dirige a cada uno de los
participantes como tiene que realizar el baile que le ha
tocado en suerte: Baile que será juzgado, una vez
interpretado, por un jurado donde destacan profesionales del
mismo y algún que otro relleno.
En este concurso, entre los famosillos escogidos, no le
puedo decir famosa, porque no lo es ni a distancia de lo que
es ser famosa, está Belén Esteban que, por supuesto, cuenta
con todo el apoyo de sus seguidoras, todas al mismo nivel
cultural que la “Princesa del pueblo” que a la hora de
votar, no se lo piensan dos veces, votan por su ídolo, Belén
Esteban. Manda… la cosa.
Esta señora que de baile sabe tanto como yo de arquitectura,
es salvada cada semana por sus incondicionales, aunque baila
como un caballo de madera con las patas articuladas. O sea,
para entendernos, arrastra las piernas y se mueve con menos
sal que un huevo de pava. La pobre no está llamada por la
senda del baile.
Pues ni les quiero contar la que se ha liado porque a Poti,
se le ha ocurrido decir que el que más méritos tiene para
ganar es Víctor Janeiro. En el programa “Sálvame” que
presenta el premio Onda, Jorge Javier, no se han comido a
Poti, porque no estaba cerca. Lidya Lozano, “la milagrosa”,
que resucitó a la hija de Al Bano Y Romina Power ha avisado
que nunca le dará su voto a Víctor Janeiro. Con lo cual,
según me cuentan mis informadores, tal y como dice todos
estos de la prensa del corazón, ha dado lugar a que Víctor,
lleve una semana sin dormir ni comer.
“El Intelectual”, Kiko Hernández, no lo considera el
ganador, la ganadora debe ser, sin tener mérito alguno,
porque baila estilo “pingüino”, lo mismo un pasodoble que
vals o lo que le echen tiene que ser, cómo no, la sin par
Belén Esteban.
Y no se equivoquen, aunque no tiene ni p… idea de baile,
seguro que será la ganadora del concurso, entre los
aplausos, felicitaciones besos y abrazos de sus compañeros
de “Sálvame” y el deliro, los desmayos y el llanto a moco
caído de todas sus seguidoras. Seguimos siendo un país de
pandereta y de analfabetos.
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OPINIÓN / MIS COSAS
