Los tres alumnos a los que un compañero del Grado Medio de
Hostelería del IES Almina denunció anteayer ante la Policía
Nacional por acosarle como miembro de la comunidad árabo-musulmana
y como homosexual han reconocido haberle metido en su
mochila cinco kilogramos de chocolate pero han negado que
tal gesto fuese más allá de una “broma”.
El denunciante, Y. A. H., que ha sido expulsado del centro
educativo durante tres días como presunto responsable de un
intento de robo del dulce y de la pelea que protagonizó
posteriormente con los tres estudiantes mecionados reclamó
ayer en declaraciones a este periódico que sus supuestos
agresores reciban al menos “la misma sanción” que ha recaído
sobre él.
La Policía y la Administración educativa han iniciado una
investigación sobre los hechos, que el joven de 19 años
presentó como un acoso de tinte xenófobo y homófobo.
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