La titular del Juzgado de lo Penal número uno dictó ayer
sentencia condenatoria para un sujeto que respondió por un
delito contra la salud pública, es decir, tráfico de
estupefacientes.
Por ello, el acusado deberá hacer frente a tres años y dos
meses de prisión y la correspondiente multa además del abono
de las costas procesales aceptando los hechos recogidos en
el escrito de acusación del representante del Ministerio
Fiscal con los que el imputado se conformó. Estos sucedieron
el 26 de junio de 2009 en la zona de preembarque de
vehículos de la Estación Marítima de Ceuta, cuando el
procesado se disponía a cruzar el Estrecho en uno de los
ferrys.
Fue cuando el can de la Guardia Civil detectó que en el
turismo del acusado había indicios de droga, por lo que los
agentes terminaron localizando 22 kilos de resina de hachís
que iban ocultos en un doble fondo del habitáculo del coche.
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