El sindicato CSI.F salió ayer en defensa de su delegada en
el hospital, Malika Abdesalam, después de que el Ingesa
recordara que la también ex directora territorial fuera
“condenada por graves delitos” derivados de su gestión.
Para CSI.F, el actual director territorial, Jesús Lopera, ha
demostrado con estas manifestaciones su “odio manifiesto”
hacia este sindicato y Abdesalam.
El sindicato entiende las referidas manifestaciones un
“ataque a los derechos y libertades sindicales” y asegura
que actuará con “todos los medios legales a nuestro alcance”
para que no se produzcan nunca más.
El comunicado del sindicato continúa argumentando que las
reivindicaciones de la junta de personal del Ingesa, que ha
convocado una protesta para el próximo día 5 de mayo, “son
legítimas y están amparadas por la ley”.
CSI.F acusa a Jesús Lopera de carecer de “cualquier
racionalidad y argumentos de réplica” al optar por trasladar
las motivaciones de la protesta a “intereses políticos que
nada tienen que ver con nuestra central sindical y lo
personaliza en nuestra delegada”.
El sindicato sigue acusando a Lopera de haber demostrado en
varias ocasiones su “animadversión hacia CSI.F, pero sobre
todo hacia nuestra delegada Malika Abdesalam”. En este
sentido, señala que “además de su propia lucha en contra de
CSI.F”, las declaraciones de Lopera se deben a “motivos de
tipo discriminatorio, dado que se ataca con fiereza a una
sola de las delegadas de la junta de personal que está
compuesta por 19 miembros” y ha pedido su cese.
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