La Guardia Civil evitó ayer un pase de droga e interceptó
más de 120 kilos de resina de hachís. Tal como se informó en
un comunicado de prensa, los hechos sucedieron sobre las
2:00 horas, cuando un componente de la Comandancia de la
Guardia Civil que prestaba servicio de operador de cámara
térmica en la zona fronteriza con Marruecos de Benzú,
participó el avistamiento de un grupo de unas 3 personas,
que realizaban "movimientos sospechosos" en la lengua de la
playa próxima a la citada barriada. Ante la sospecha de que
pudiera tratarse de un intento de pase de sustancia de
estupefaciente, se activaron "de forma inmediata" los
dispositivos correspondientes para proceder a la
comprobación y en su caso actuación de la situación
alertada.
Personadas las patrullas de Costa
de esta Comandancia, y tras haberse comprobado la huida de
los individuos que realizaban la manipulación y movimientos
avistados por los sistemas de vigilancia nocturna, se
procedió a un reconocimiento exhaustivo de la zona, sin que
diera resultado positivo. En dicho reconocimiento, fueron
hallados 4 fardos de arpillera conteniendo un total de
120.750 gramos de resina de hachís, valorados en más de
166.000 euros, así como una embarcación neumática de cuatro
metros de manga por 2 de eslora, marca ‘Quiksilver’,
provista de un motor ‘Suzuki’ de 40 CV "careciendo ambos de
numeración o de cualquier otro indicio que determine su
procedencia".
Del hecho se instruyen las
oportunas diligencias, continuándose la investigación para
localizar e identificar a los autores, quedando la sustancia
y embarcaciones que se intervineron depositados en el Área
Funcional de Sanidad de la Delegación del Gobierno.
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