El plan para la preservación y exposición pública de los
vestigios medievales encontrados en el pasaje Fernández
experimentará esta semana un avance con una nueva reunión
convocada por la Ciudad con la promotora propietaria de los
terrenos. En este encuentro, la Consejería de Fomento pondrá
sobre la mesa el estudio previo preparado por Cultura para
que los restos, que incluyen un oratorio, puedan visitarse.
La Ciudad y la empresa propietaria de los terrenos del
pasaje Fernández, en la que se construye una promoción de
viviendas, se reunirán de nuevo esta misma semana para
estudiar las posibilidades de preservación y exposición
pública de los restos históricos, de época medieval,
aparecidos durante las obras. Tal como señalaron desde el
Ejecutivo, la finalidad de este encuentro es poner sobre la
mesa las posibilidades de materialización del proyecto para
conservar estos valiosos vestigios, que incluyen un oratorio
del siglo XIV en un excepcional estado de conservación.
Estas posibilidades están recogidas en un estudio previo o
anteproyecto redactado por los servicios técnicos de la
Consejería de Educación, Cultura y Mujer con los que se
pretende que al menos parte de este yacimiento pueda ser
visitable por el público mediante un acceso que lo
independice de la promoción de vivienda que se levanta en el
solar.
El conjunto histórico que a partir de la prospección
arqueológica encargada por la propietaria de los terrenos,
con nivel de Protección 1, se encargó como paso previo al
comienzo de la obra se describió por parte de los
arqueólogos como “un referente para conocer el urbanismo
islámico bajomedieval del Mediterráneo occidental”. Estos
vestigios, que también según los técnicos se hallaron en un
estado de conservación excepcionalmente bueno, se
identifican con el conocido como ‘arrabal de En medio’ y
corresponden a tres épocas de ocupación del solar:
altomedieval, almohade y meriní (entre los siglos IX y XV).
A cinco metros bajo la actual cota se descubrieron, además
del oratorio, una calle y otros tres edificios, junto a tres
enterramientos de una necrópolis asociada al templo
islámico.
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