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La Consejería de Bienestar Social de Melilla firmó ayer dos
convenios con Cáritas Interparroquial con el objetivo de
ayudar a erradicar la pobreza en la ciudad, así como para
favorecer integración de los más necesitados a partir de
ayudas al pago del alquiler.
La consejera de esta área, María Antonia Garbín, y la
directora de Cáritas en Melilla, Pilar Illázquez, han
rubricado los dos acuerdos que suponen una aportación por
parte del Gobierno melillense de 135.000 euros.
Según ha explicado a los periodistas la consejera, entre los
beneficiarios de estos acuerdos se encuentran matrimonios
mixtos (español-marroquí) sin acceso a otros recursos
sociales, mujeres inmigrantes con hijos a su cargo y orden
de desahucio, así como mujeres inmigrantes víctimas de malos
tratos.
Illázquez ha resaltado la necesidad de firmar estos
convenios, sobre todo teniendo en cuenta que la crisis ha
motivado el regreso a Melilla de muchas personas
inmigrantes, que habían estado trabajando en la península y
que, al perder su trabajo, regresan con sus familias.
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firma
