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La Dirección Provincial del Ministerio de Educación tiene
previsto abrir “durante la próxima semana” el plazo de
admisión de solicitudes de escolarización para el año
académico 2010-2011, según adelantaron ayer fuentes de toda
solvencia a este periódico. Este proceso incorporará
pequeños cambios en los baremos de calificación y selección
de peticiones y aún menos importantes en las áreas de
influencia.
El Ministerio de Educación (ME) abrirá la próxima semana el
plazo de admisión de solicitudes de escolarización de
alumnos en los centros públicos y privados concertados que
imparten el segundo ciclo de la Educación Infantil, la
Educación Primaria, la Educación Secundaria Obligatoria y el
Bachillerato en las ciudades de Ceuta y Melilla que regula
la Orden ministerial publicada en el BOE el pasado 29 de
marzo. El proceso de escolarización para el curso 2010-2011
incorporará pequeños cambios tanto en los baremos de
calificación de las solicitudes de centro como en las áreas
de influencia de cada uno, en este último caso sin apenas
relevancia.
Esta primavera el espacio donde se asiente el “domicilio
familiar” (6 puntos) valdrá casi el doble a la hora de
escoger colegio que el “lugar de trabajo de uno cualquiera
de los padres o tutores legales” (4, antes eran 6). Si
cualquiera de ellos (casa u oficina) está ubicado “en las
áreas limítrofes a la de influencia del centro solicitado”
se concederán dos puntos.
En cambio crece el valor de tener un hermano del candidato
estudiando en el centro preferido (de 4 a 5 puntos; dos por
cada hermano extra) a costa de rebajar el peso de que uno de
los progenitores trabaje en el colegio (de 4 a 3).
Cada hermano extra computará con dos puntos (el año
académico anterior eran 3). Sólo que el escolarizable tenga
discapacidad valdrá más (uno más que hasta ahora, 4, el
doble que en el caso de que quien padezca minusvalía sea el
padre o la madre).
También pierde peso, de 3 a 2 puntos, en el baremo el hecho
de contar con ingresos anuales muy reducidos (por debajo del
salario mínimo, unos 630 euros al mes).
Los empates que se produzcan “se dirimirán aplicando, en el
orden establecido y hasta el momento en que se produzca el
desempate” cinco criterios: 1) mayor puntuación obtenida en
el apartado de hermanos matriculados o padres/tutores
trabajando en el centro; 2) mayor puntuación obtenida en el
apartado de proximidad domiciliaria; 3) menor renta anual
por cápita de la unidad familiar; 4) mayor puntuación por
concurrencia de discapacidad y, en último extremo, 5)
asignación por sorteo público ante el Consejo Escolar del
centro.
Ninguna “discriminación”
En la admisión de alumnos “no podrá establecerse
discriminación alguna por razón de nacimiento, raza, sexo,
religión, orientación sexual, opinión o cualquier otra
condición o circunstancia personal o social”.
Los padres o tutores legales y, en su caso, los propios
alumnos que hayan alcanzado su mayoría de edad “tienen
derecho a elegir centro educativo y a que, en ausencia de
vacantes en el centro en el que se haya solicitado plaza
como primera opción, se tengan en cuenta las preferencias y
el orden manifestados en el impreso de solicitud”, aunque el
Ministerio entiende que tal derecho queda sometido al de la
Administración a no exceder una ratio razonable de alumnos
por aula en los colegios con más demanda (en Ceuta, la
Inmaculada y el San Agustín entre los concertados y el
Ortega y Gasset entre los públicos).
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