UPyD en Melilla, a través de su coordinador Emilio Guerra,
propuso una reforma integral laboral que impulse el cambio
de modelo productivo y que permita el aumento de la
productividad. A través de una nota de prensa, el upedista
explicó que uno de los puntos más importantes de esta
reforma sería la eliminación de los contratos temporales de
trabajo, de modo que todos los nuevos contratos serán
indefinidos desde el principio.
El coordinador de Unión, Progreso y Democracia (UPyD) en
Melilla, Emilio Guerra, propuso ayer una reforma integral
del mercado de trabajo que impulse el cambio de modelo
productivo y que permita el aumento de la productividad.
Esta reforma, según explicó a través de una nota de prensa,
respeta los derechos adquiridos en los contratos ya
existentes, por lo que únicamente se refiere a los nuevos
contratos que tras la reforma se firmarían.
“Todos los contratos nuevos tendrán que ser de una única
modalidad, mientras que los temporales serán suprimidos
radicalmente, excepto para la sustitución de bajas
temporales”, explicó el upedista, que recalcó que, de este
modo, “todos los nuevos contratos habrán de ser indefinidos
desde el principio”.
Asimismo, avanzó Guerra que los nuevos contratos únicos
tendrían una indemnización por despido inicial de 12 días
por año en el primer año. A partir de ahí, irían aumentando
en dos días por año en los años sucesivos hasta un tope de
36 días por año, con un máximo de 24 meses.
“Malos tiempos”
Finalmente, el número uno de UPyD en Melilla advirtió a los
melillenses lo que, en su opinión, “pueden ser muy malos
tiempos” por la “incapacidad e ineficiencia de la clase
política local”. “Vivimos tiempos especialmente delicados”,
subrayó Guerra, que hizo hincapié en que “los actuales
gobernantes y representantes públicos están demostrando no
saber gestionar la crisis”.
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