Un centenar de personas se concentró ayer frente a la sede
de los juzgados de Melilla para pedir que se respeten los
derechos de los presos melillenses encarcelados en la
Península para que cumplan su pena en la ciudad autónoma,
tal y como establece la Ley y el Reglamento Penitenciario.
Esta concentración ha sido organizada por los familiares de
los dos presos melillenses fallecidos en las últimas
semanas, Mohamed El Founti, que murió en la prisión de
Alhaurín de la Torre (Málaga) el 15 de marzo, y Fuad Kaddur,
que falleció en la cárcel Puerto III (Cádiz) el 25 de
febrero.
En declaraciones a los periodistas, Abdelkader El Founti,
padre de uno de los fallecidos, ha recordado que el artículo
2 del Reglamento Penitenciario establece “la reeducación y
reinserción de los presos junto a su familia y sociedad de
procedencia”.
Asimismo, la Ley Orgánica General Penitenciaria refleja en
su artículo 12.1 que se debe evitar “el desarraigo familiar
y social de los presos”.
El Founti ha afirmado que estas premisas no se cumplen en la
actualidad, por lo que ha pedido que no se lleven a los
presos de Melilla para cumplir pena en la Península.
También ha solicitado que se les informe sobre los traslados
que se realizan “de forma aleatoria”, ya que no tienen
derecho a desplazarlos “para que mueran en las cárceles de
fuera”.
Asimismo, ha exigido que las prisiones españolas cumplan con
la Ley Orgánica General Penitenciaria, que en su artículo
3.4 indica que la Administración Penitenciaria “velará por
la vida, integridad y salud de los internos”, en sintonía
con el artículo 25.2 de la Constitución Española sobre la
tutela judicial efectiva de los tribunales.
El Founti, al igual que Mustafa Kaddur, padre del otro preso
fallecido, ha reclamado que la Dirección General de
Instituciones Penitenciarias abra una investigación para
esclarecer lo ocurrido en torno a la muerte de estos dos
jóvenes melillenses.
“Sólo pedimos Justicia y que se aclare la verdad para saber
qué ha ocurrido con nuestros hijos, porque no nos dicen
nada; que nos dejen de marear para arriba y para abajo”, ha
manifestado Mustafa Kaddur.
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