Las obras de reparación de la valla fronteriza de Melilla
estarán finalizadas dentro de un mes, que es el plazo
previsto para la instalación de un nuevo sistema de puertas
levadizas en la zona por la que pasa el Río de Oro. Este
tramo, de 70 metros de longitud, fue derribado como
consecuencia de la fuerte subida del caudal del río que
provocaron las fuertes lluvias que afectaron a nuestra
ciudad el pasado 26 de enero. A preguntas de los
periodistas, el teniente coronel jefe de la Guardia Civil de
Melilla, Ambrosio Martín Villaseñor, informó ayer de que ya
se ha aprobado un proyecto “para intentar mejorar la
eficacia del obstáculo” que supone la valla fronteriza en la
zona del Río de Oro. En ese tramo de alambrada fronteriza se
instalará un sistema similar al actual, aunque éste se verá
ampliado con dos portones más para que “cuando la venida de
agua sea mayor, incida sobre una puerta que se pueda
levantar.
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