Desde luego van juntos y, a veces,
muy apretados, sin que el éxito deportivo llegue,
necesariamente, por haber tenido cubiertas todas las
necesidades para triunfar.
El primer ejemplo lo encontramos aquí en Ceuta, donde, desde
hace unos años, especialmente para el fútbol no se escatima
nada y, a día de hoy, estamos en la misma situación en la
que se estaba en 1983 o en 1984, por poner dos ejemplos.
Y siguiendo con Ceuta, si en fútbol con las necesidades
super cubiertas, incluso en categorías juveniles de nivel
nacional, no se logra nada y ahora mismo se tiene que estar
mirando simplemente a ver si el contrario pide o no árbitros
neutrales para evitar los descensos, en las otras
modalidades deportivas, que hay menos, ya veremos lo que se
logra, dejando de lado el piragüismo, porque eso es algo muy
distinto, pero en los demás deportes los éxitos son mínimos
y no creo que debamos estar hablando de fracasos, sino de lo
que hay y que no parece que vaya a cambiar demasiado.
Volviendo al dinero, pero ya en cantidades sabrosas,
acabamos de ver como es sobrepasado éste cuando se entra en
la alta competición y es que para poder llegar hasta ahí sí
hace falta ese dinero, pero una vez en ella está “ un
resbalón” que le hace a un atleta dejar de ser medalla
olímpica para quedarse en “un don Nadie”, o llega “un tiro
al poste”, con lo que el que no tuvo suerte en ese disparo
puede ver comprometido un contrato “super millonario” para
seguir con lo que tenía que, de momento, no está muy mal.
Con estos puntos marcados, estaríamos fuera de ruta si no
hiciéramos alusión a la eliminatoria del Madrid en la Copa
de Europa, es como he llamado y seguiré llamando a esta
competición.
Lo del Madrid parecía imposible que se diera y se dio, pero
parecía imposible porque aquí, en este país, hay muchos que
desde que se levantan cada día se están ejercitando en dejar
chico al Oráculo de Delfos y, llevados por un fanatismo
vergonzante, desprecian todo aquello que no va con sus
ideales.
Ahora se habla de esa eliminatoria frente el Olímpico de
Lion y se olvidan que los franceses entraron en competición
por méritos propios, como en su día entró el Oporto, por
ejemplo, y fue campeón de Europa.
El Madrid con equipos grandes ha ganado muchas
eliminatorias, al Manchester United cuando más grande era el
equipo inglés, antes del accidente de Munich, por ejemplo,
pero también le han eliminado equipos como el Benfica, el
Mónaco o el Standart de Lieja, y nunca pasó nada, sino que
al día siguiente el metro o el autobús seguía costando lo
mismo y el aceite ni había subido su precio ni había
bajado..
¿Qué es cierto que este año se han hecho grandes fichajes?.
Lo es, pero los demás también habrán fichado a quien hayan
podido y esos fichajes, para que los listos de turno no se
equivoquen, garantizan unos ingresos de muchos millones,
pero un título sólo lo garantiza el haber actuado, en cada
encuentro, siempre mejor que sus adversarios, cosa que ni el
propio Di Stefano, y ha sido, con diferencia, el mejor de
todos los tiempos, nunca lo pudo lograr.
A partir de aquí, la próxima decepción falta por llegar,
pero no tardará mucho en darse, tanto en Europa como en el
Mundial que se disputará en el mes de junio, claro que eso
ya es otra historia de la que se están haciendo demasiadas
especulaciones, y que, también, lleva mucho dinero
aparejado.
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