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Fomento de la Delegación trabajó ayer para reabrir al
tráfico la N-352, afectada de nuevo por un derrumbe en el
talud con las lluvias del sábado. Por su parte, la Ciudad
valoró el impacto positivo de las medidas adoptadas para la
eliminación de “puntos negros” que se inundaban y cifró en
130 las actuaciones de Bomberos y en 25 los realojados.
La administración del Estado y de la Ciudad trabajaron ayer
en la reparación y limpieza de los desperfectos causados por
el temporal del sábado, la primera, para reabrir al tráfico
la avenida de Martínez Catena. Tal como informó El PUEBLO en
su edición de ayer, la carretera quedó de nuevo cerrada tras
derrumbarse por segunda vez el talud que hace dos semanas
obligó a desviar el tráfico y a colocar un muro de hormigón
para contener la caída de tierra y piedras antes de volver a
autorizar la circulación. Ayer, y tras repararse unos metros
de la pantalla que habían vencido ante el empuje del lodo y
las piedras desprendidas de la ladera, esta importante vía
de comunicación quedó reabierta al tráfico, tal como
confirmaron a última hora de la tarde desde el área de
Fomento de la Delegación del Gobierno.
Por su parte, desde la Ciudad Autónoma, su consejero de
Gobernación, José Antonio Rodríguez, valoraba la efectividad
de las medidas adoptadas para la eliminación de puntos
negros de inundación y señalaba que sólo en algunas zonas en
las que aún no se han terminado este tipo de obras, se
produjeron problemas de este tipo que se concentraron en el
momento de la “tromba de agua” y que desaparecieron “en una
hora”.
De acuerdo con los datos facilitados por la Ciudad, el
balance total de los desalojos que hubo de llevar a cabo la
Consejería de Asuntos Sociales, previo informe de Fomento,
eleva a 25 las personas afectadas, pertenecientes a nueve
familias y tras un nuevo caso registrado de madrugada en el
barrio de La Almadraba. En esta zona, sobre todo, a la
altura de Ducar, se produjeron según informó el consejero
avalanchas de tierra en cuya retirada se afanó una brigada
de Obimace. El lugar fue visitado por el presidente Vivas,
así como por las consejeras de Medio Ambiente, Yolanda Bel,
y Asuntos Sociales, Carolina Pérez.
En total, los Bomberos, con un dispositivo especial de 36
efectivos y 11 vehículos, llevaron a cabo 130 actuaciones,
muchas de ellas, de achique en zonas como Bermudo Soriano.
En San Antonio cayó otro árbol y García Aldave hubo de ser
cortada de nuevo a mediodía por un corrimiento de tierra.
Cortes de luz
Entre los problemas causados por las lluvias se encuentra
también el corte de luz que según la empresa de Alumbrado,
afectó a la zona de la ciudad que va desde la central de
Endesa hasta el Monte Hacho entre las 10.30 y las 14.05
horas de ayer. Según explicaron, la causa estuvo en la
inundación del Centro de Seccionamiento de Alta Tensión de
Las Heras, cuya cubierta hubo de ser repuesta.
En el Hospital Universitario hubo el sábado “pequeñas
flitraciones de agua provocadas por problemas en el sellado
de las ventanas” y que “afectaron a varias habitaciones”,
por lo que, según se explicó en una nota, el Ingesa pedirá
“explicaciones” a la constructora, Dragados.
El secretario general del PSOE, José Antonio Carracao, instó
ayer a la Ciudad a “acometer obras urgentes que doten de
defensas a las zonas donde sabemos que siempre se producen
los principales daños” y “dar cumplimiento a las mociones”
presentadas al Pleno por su partido.
Hoy la ciudad vuelve a estar en alterta amarilla por
lluvias.
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Repercusiones del temporal
