La borrasca y el fuerte viento del suroeste obligó en la
sobremesa de ayer a cerrar el puerto de Ceuta durante casi
dos horas, una decisión que, según el presidente de la
Autoridad Portuaria, José Torrado, no se adoptaba por lo
menos desde hace cinco años. De todos modos, las conexiones
marítimas con Algeciras se habían interrumpido desde
primeras horas de la mañana y no se restablecieron, y con
importantes restricciones, hasta pasadas las cinco y media
de la tarde, con travesías bastante ajetreadas que tuvieron
que lidiar con enormes olas en la costa gaditana cuando ya
eran posible los atraques en Ceuta.
Algunos tuvieron la astucia de tomar el ferry de Balearia de
las 7.15 y llegar hasta Algeciras aunque fuera zozobrando
sobre la mar y con cierto retraso, porque la situación
metereológica fue a partir de entonces a peor hasta que la
Capitanía Marítima de Ceuta aconsejó cerrar temporalmente el
puerto de la ciudad autónoma al tráfico marítimo.
El presidente de la Autoridad Portuaria, José Torrado,
comunicó su decisión de suspender la navegación y todo el
tráfico marítimo a las 14.32 horas, previo informe del
capitán marítimo de Ceuta, Jesús Fernández Lera, y los
prácticos del puerto, “habida cuenta de las adversas
condiciones de mar y viento reinantes en la zona”.
Torrado explicó a EL PUEBLO que la decisión se tomaba en
cumplimiento de la Ley de Puertos del Estado y la Marina
Mercante “por razones de seguridad”. El presidente de la
Autoridad Portuaria argumentó que las condiciones
meteorológicas obstaculizaban ostensiblemente las
operaciones de maniobra, de atraque y desatraque y la
accesibilidad al puerto. Tanto Torrado como Fernández Lera
destacaron ayer lo excepcional de las circunstancias que
obligaron a cerrar el puerto. Una decisión que no se tomaba
desde al menos hace cinco años, porque lo más común desde
entonces había resultado la suspensión temporal de alguna
salida en el transporte de pasajeros, que es una decisión
individual del capitán de cada buque.
La notificación de la reapertura del puerto llegaba a las
16.32 horas, pero la calma era relativa. El capitán marítimo
esperaba todavía las 17.30 h. la inminente salida desde
Algeciras hacia Ceuta de los buques Pasión por Formentera y
Ciudad de Málaga, cuando el temporal ya había amainado un
poco en el puerto de la ciudad autónoma, permitiendo los
atraques “con las precauciones debidas” de los ferrys.
Fernández Lera auguró una travesía “horrorosa” debido a
estado de la mar en la costa gaditana, pues a esa hora se
registraban en Punta Europa olas de hasta cinco metros de
altura.
Con todo, la navegación y el tráfico marítimo se restablecía
en la tarde de ayer con numerosas restricciones. El capitán
marítimo continuó explicando que no navegarían ninguno de
los rápidos, ni los de la naviera FRS, ni los de
Acciona-Transmediterránea ni el de su filial Euroferrys.
José Torrado, por su parte, resaltó la falta de incidencias
en la Estación Marítima de Ceuta a causa de la suspensión de
los barcos. De hecho, continuó apuntando el presidente de la
Autoridad Portuaria, eran pocos los ciudadanos que habían
optado esa mañana por tomar el ferry que conecta con la
Península.
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