OPINIÓN - MIÉRCOLES, 3 DE MARZO DE 2010

Accidentes laborales

El desgraciado suceso que ayer a última hora de la tarde tuvo lugar en Fuerte Mendizábal, cuando parte de los explosivos que se utilizan para los trabajos de desmonte de la futura nueva cárcel de la ciudad estallaron hiriendo a ocho trabajadores, vuelve a poner en la picota la necesidad de que patronal y sindicatos unan sus fuerzas en una sola para aplicar todas las medidas preventivas posibles en lo que a evitar accidentes laborales se refiere. Más, si cabe, cuando el trabajo que se desempeña es especialmente arriesgado. A la espera de lo que determine la investigación oportuna sobre qué sucedió en Fuerte Mendizábal, que también pudo ser un incidente inevitable, toca reforzar todas las precauciones y no confiarse nunca.
 

Solidaridad frente a los ataques a la libertad

El ataque que la madrugada de ayer sufrió la redacción del diario EL FARO de Ceuta debe ser condenado no sólo por los partidos políticos y el resto de medios y profesionales de la comunicación de la ciudad autónoma, a los que también nos han agredido los violentos con sus cócteles molotov indirectamente, sino que tiene que merecer la repulsa de toda la sociedad ceutí, que no puede ver cómo se mancilla uno de los principos fundamentales de la democracia en la que hemos decidido vivir, el de la libertad de expresión y de prensa. Este periódico y su empresa editora desean trasladar toda su solidaridad y apoyo frente a los bárbaros a sus homólogos del decano, que como cualquier otro medio no puede soportar de ninguna manera actos como el de ayer.