El jurado del Premio María de Eza nombró ayer como ganadora
de su XV edición a la docente Carmen Mosquera Merino, la
cual se trasladará desde Madrid este fin de semana para el
lunes recoger su galardón en la Palacio Autonómico. Haber
logrado la conciliación entre la vida laboral y profesional
han sido los valores que el jurado ha tenido en cuenta y que
ella misma reconoce como “difícil” tarea ya que “a veces,
pensé en dejar el trabajo aunque la labor docente ha sido
gratificante”.
”Agradezco a la ciudadanía ceutí que se ha acordado de mí
aunque me parece que hubiese sido mas idónea una persona más
joven y activa ya que yo estoy jubilada”. Estas fueron las
primeras declaraciones efectuadas por la XV ganadora del
Premio María de Eza, la docente Carmen Mosquera Merino.
El jurado del certamen tuvo en cuenta el mérito de la
candidata al haber logrado conciliar la vida laboral y
profesional, considerándola como “una mujer avanzada a sus
tiempos si consideramos además de su currículo profesional,
el que fuese madre de ocho hijos a los que alentó al estudio
y educó en los principios de responsabilidad y esfuerzo”,
reconoció la consejera de Educación, Cultura y Mujer, Mabel
Deu, que dio a conocer el fallo junto a los otros miembros,
entre ellos, la delegada del Área de Mujer, Rabea Mohamed;
la jefa de servicio del Centro Asesor de la Mujer, Viviane
Berros; el cronista oficial de la Ciudad, José Luis Gómez
Barceló; el portavoz de la Fundación Premio Convivencia,
Ernesto Saenz; la decana del Colegio de Abogados, Isabel
Valriberas; y la presidenta de la Asociación de Amas de
Casa, Consumidores y Usuarios, Inés López Silva.
La ganadora del ‘María de Eza’, “es una persona dinámica a
sus 85 años pues sigue haciendo gimnasia y su afán es
continuo por el aprendizaje, adaptándose a las nuevas
tecnologías”, adelantó Deu, que reveló que los votos se
establecieron por unanimidad y la candidatura fue propuesta
por tres entidades: la Asociación Mujeres Vecinales, la
Asociación Mujeres Empresarias, y la Asociación de Amas de
Casa, Consumidores y Usuarios. Carmen Mosquera ejerció como
profesora en Palma de Mallorca y en Ceuta a finales de los
40 hasta que en 1982 consiguió un traslado al Instituto
Mixto Número 4 de Leganés; dos años después, al centro Gran
Capitán de Madrid, donde se encontró con su marido, que le
precedió en el traslado a la capital, y donde se mantuvo
hasta la jubilación. Además, la XV ganadora del certamen,
forma parte activa del Instituto de Estudios Ceutíes y ha
participado como docente en varios congresos y escrito
artículos publicados en las actas congresuales.
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“La conciliación fue difícil porque tuve ocho hijos pero me
concedieron la reducción de jornada”
Carmen Mosquera se mostró muy
orgullosa por haber obtenido el XV Premio María de Eza
aunque no dudó en reconocer que “la conciliación fue difícil
porque tuve ocho hijos aunque gracias a que tuvieron buena
salud y eran responsables pude continuar. A veces pensé en
dejar el trabajo pero pedí la reducción de jornada y sueldo
para poder dedicarme a mis hijos”. Pese a estar jubilada,
Mosquera recuerda bastante bien sus tiempos como profesora
por ello confesó que “la labor de docente ha sido
gratificante porque he tenido muy buenos alumnos excepto
alguno discordante. Muchos de ellos han ido a la ruta de
América y han estado bien formados e inspirados”. La
galardonada se trasladará este fin de semana a la ciudad y
el lunes recibirá de manos del presidente de la Ciudad, Juan
Vivas, su merecido Premio María de Eza, en su XV edición.
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