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La Policía sigue una línea de investigación tendente al
esclarecimiento del suceso sufrido ayer en las instalaciones
de El Faro que vio afectado su hall de entrada y cuadro
eléctrico por causa del fuego provocado alrededor de las
04’00 horas de la pasada madrugada. Un ataque que ha sido
considerado como un atentado a la libertad de expresión y
condenado tanto por el Gobierno, como por los representantes
políticos y sociales de la ciudad, entre ellos El Pueblo.
Al parecer, unos desconocidos aprovecharon la madrugada del
pasado martes para intentar incendiar las instalaciones de
El Faro, empleando para ello alcohol como producto
inflamable. Situación que no lograron por la rápida
actuación de los miembros del Servicio de Extinción de
Incendios que lograron atajarlo a tiempo antes de que las
llamas se propagaran hacia el interior.
El incendiario, según maneja la investigación, habría
penetrado al interior del portal desde donde inyectando
alcohol por alguna de las rendijas, intentó que la redacción
fuera pasto de las llamas.
En pocos minutos los bomberos controlaron la situación
aunque las llamas y el calor ya habían afectado el cuadro
eléctrico y el vestíbulo.
Condenas
El Consejo de Gobierno lamentó y condenó ayer “en el
supuesto de que los indicios, que así lo indican, sean
reales, el supuesto siniestro”, dijo textualmente Yolanda
Bel en nombre del Ejecutivo ceutí, quien añadió un mensaje
de apoyo y solidaridad al medio en su conjunto, y expresó su
deseo de que “no tengamos que lamentar estos hechos en otros
medios de comunicación”.
Por su parte, el PSOE a través de su secretario general,
José Antonio Carracao y asesor del delegado del Gobierno
condenó, como hizo el líder de UDCE, Mohamed Ali, el suceso
y rechazaron “a quienes no entiendan las reglas del juego
democrático”, mostrando además su “solidaridad” con los
trabajadores y la empresa de comunicación.
En parecidos términos se expresó la Unión, Progreso y
Democracia sumándose así a la condena generalizada, a la que
se suma EL PUEBLO por entender que se trata de un ataque a
los principios más básicos de la democracia y libertad de
prensa. La redacción de El Faro pudo reponerse y trabajó con
profesionalidad ayer para estar hoy en la calle y cumplir
con su compromiso ante los lectores.
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incendio
