Un larguísimo debate de casi dos horas sirvió de prólogo
ayer en el Salón de Plenos a la aprobación del ‘Plan de
Maximización de Ingresos y Ajustes Fiscales 2010’ de la
Ciudad, una hoja de ruta con la que el Gobierno pretende
prever los efectos que sobre sus arcas tenga la crisis este
año que fue muy criticada por la oposición.
“Ejercer la responsabilidad que se nos presume”. Ese es,
según explicó ayer el consejero de Hacienda, Francisco
Márquez, el objetivo último del ‘Plan de Maximización de
Ingresos y Ajustes Fiscales 2010’ que presentó al Pleno en
un ajetreado debate con Ali y Ramírez que se prolongó
durante cerca de dos horas y que terminó con la socialista
llamándole “atorrante”, según ella por “pesado”, adjetivo
que el consejero solicitó fuese retirado por significar
también “vago”, a lo que la portavoz de la oposición se
negó.
Fue sólo una anécdota en el debate de lo que en origen eran
cinco puntos del Orden del Día que se quedaron en un solo a
la hora de discutir.
Márquez reiteró que la crisis sigue así y que la Ciudad
responde con “previsión”, “responsabilidad” y “prudencia” a
los efectos adversos que presumiblemente todavía tendrá este
año sobre sus ingresos para poder seguir invirtiendo y
manteniendo la calidad y extensión de los servicios que
ofrece.
Para ello defendió la oportunidad de eliminar o congelar
algunas tasas (la de extinción de incendios o la de
mercados, de mínimo calado en las cuentas públicas) y de
vender parte del patrimonio “improductivo” de la
Administración pública (locales y garajes comerciales en
Azcárate, el Polígono, Bermudo Soriano y Plaza Mina).
Igualmente argumentó las virtudes de seguir luchando contra
el fraude fiscal con más énfasis y de establecer una nueva
tasa urbanística que afectará fundamentalmente “a las
sociedades” y que “resarcirá el coste de un servicio que la
Ciudad ya prestaba”.
Ali: “No queda ni un duro”
Por separado, el portavoz de UDCE, Mohamed Ali, y la del
PSOE, Inmaculada Ramírez, cargaron una y otra vez contra lo
que ellos entienden que es un afán del Gobierno del PP, el
de incrementar o crear nuevos impuestos porque en las arcas
municipales “no queda un duro”, expresión del primero que
Márquez rechazó tajantemente como “el cuento del lobo”.
Los grupos de la oposición también cargaron contra el
anuncio de más inspecciones fiscales que sublevó a la
patronal ceutí porque, a su juicio, presume “hostigamiento”
hacia el empresariado, aunque tanto Ali como Ramírez
cerraron filas sobre la necesidad de luchar “siempre, no
sólo ahora” contra el fraude tributario.
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La Escuela de Negocios se pagará a crédito
El Pleno dio ayer su visto bueno
por unanimidad a una propuesta del consejero de Economía y
Empleo, Guillermo Martínez, para autorizar a la Sociedad de
Fomento PROCESA a concertar una póliza de crédito con una
entidad bancaria con el propósito de disponer de los fondos
que finalmente acabará recibiendo de la Unión Europea para
el desarrollo de las actuaciones previstas en el programa
‘España-Fronteras Exteriores’, que pasan por la construcción
de la Escuela de Negocios que acogerá el baluarte de San
Pablo. Martínez explicó que allí se ofrecerán cursos MBA con
profesores de prestigio nacional e internacional para formar
a directivos de empresas de Ceuta, Marruecos y la Península
para contribuir a hacer de la ciudad una plataforma
logística de servicios para el Norte de África. Con mínimas
pegas tanto Ali (UDCE) como Ramírez (PSOE) le dieron su
apoyo.
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