Los efectos del temporal se dejaron sentir, una vez más, en
nuevos destrozos, quejas vecinales y desprendimientos leves:
los tejados de dos viviendas fueron dañados, los vecinos se
quejaron de dos vías cortadas sin señalizar y se registró un
pequeño corrimiento en la subida al Monte Hacho.
Durante la mañana de ayer dos viviendas bajas emplazadas en
la barriada de Patio Castillo vieron dañados sus respectivos
techos debido a la acción del temporal. Los techos “se
encontraban mal sustentados”, según señalaron los efectivos
del Cuerpo de Bomberos que atendieron a sus moradores.
Como afirman los mismos agentes, los tejados de ambas casas
bajas estaban fabricados con materiales “débiles” como tela
asfáltica, escayola o cartón piedra.
En la primera de las viviendas afectadas los bomberos
encargados del caso registraron el desprendimiento de una
placa de tela asfáltica de unas dimensiones de 40 por 40
centímetros. Esta placa cayó arrastrando también una tira de
escayola que formaba igualmente parte del conjunto de la
cubierta del edificio. Únicamente ha habido que lamentar
daños de tipo material en el accidente.
La dueña de esta casa baja ha solicitado la reparación de su
tejado y el Cuerpo de Bomberos ha elevado su petición a la
Consejería de Asuntos Sociales.
En la segunda casa, el techo, realizado con cartón piedra,
también quedó resentido y en malas condiciones debido a la
acción del temporal.
Fuentes del Cuerpo de Bomberos de la ciudad han señalado,
respecto al problema que con el temporal han padecido estas
dos viviendas, que “no es lógico que en estas casas vivan
todavía personas” y que “lo que es preciso hacer es tirar
estas viviendas y trasladar a sus habitantes a otras más
dignas”.
Otros incidentes
Por otra parte, a este diario han llegado quejas de vecinos
de la ciudad señalando que la carretera N-352, cortada, no
se encontraba señalizada en la web de la Dirección General
de Tráfico. La misma queja se ha reseñado en García Aldave,
cortada al comienzo de la carretera sin un aviso que lo
indicase.
Para finalizar, también se ha registrado un desprendimiento
“leve” en la carretera que asciende hasta el Monte Hacho. La
arena y las piedras han rodado hasta la vía, pero, según ha
señalado el Cuerpo de Bomberos, “se han quedado retenidas
justo en el arcén y no la han llegado a tocar”.
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