Un subsahariano del CETI intentó ayer agredir sexualmente a
un menor melillense que vive en la Urbanización Las
Palmeras, aunque no llegó a consumar sus intenciones, según
informaron a MELILLA HOY fuentes policiales. La víctima, de
15 años de edad, sufrió heridas leves, de las que fue
atendido en el Hospital Comarcal. El presunto agresor
intentó huir, pero fue interceptado gracias a la rápida
intervención de la Policía Local.
Un subsahariano del Centro de Estancia Temporal de
Inmigrantes (CETI) intentó ayer agredir sexualmente a un
menor melillense, vecino de la Urbanización Las Palmeras,
aunque finalmente no consiguió consumar sus intenciones.
Según informaron a MELILLA HOY fuentes policiales, los
hechos se produjeron ayer, a primera hora de la tarde, en un
descampado de la Carretera de Farhana, cerca del Colegio
Nuestra Señora del Buen Consejo.
La víctima, que tiene 15 años de edad, sufrió solamente
heridas leves, de las que fue tratado inmediatamente en el
Hospital Comarcal. Su presunto agresor intentó darse a la
huida, pero fue interceptado poco después por la Policía
Local, que movilizó en esta actuación al Grupo de Primera
Respuesta (GPR) y al Grupo Canino (GPR).
Las mismas fuentes indicaron que tras la detención, la
Policía Local condujo al presunto agresor a la Jefatura
Superior de Policía para su puesta a disposición judicial.
El hermano y el primo del menor del que un inmigrante del
CETI de Melilla pretendió abusar sexualmente ayer fueron
claves a la hora de identificar al supuesto autor de los
hechos, así como para evitar que se consumase la agresión.
Según detalló ayer la Consejería de Seguridad Ciudadana en
un comunicado, a las 16:40 horas de ayer, la sala del 092
recibió una llamada denunciando la supuesta agresión sufrida
por un menor a la altura del número 56 de la carretera
Farhana.
Al llegar al lugar, los agentes de la policía encontraron en
un descampado al menor, “con síntomas de nerviosismo,
ansiedad, llorando, con el labio ensangrentado, con el
pantalón del chándal bajado a la altura de la rodilla, y la
ropa interior puesta, la camiseta que vestía rajada por los
laterales y con arañazos a la altura de la costilla”.
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