Regino Hernández no pudo cumplir el lunes el sueño de
subirse al podio en unos Juegos Olímpicos de Invierno tras
caer en los octavos de final en la modalidad de
‘boardercross’ de snowboard. A pesar de que el ceutí tenía
depositadas muchas esperanzas en estas Olimpiadas, sus
primeras, el gran nivel de sus oponentes y la dificultad de
la pista se convirtieron en dos obstáculos difíciles de
superar para Regino.
A pesar de que salió muy fuerte en la primera de las mangas
de la fase clasificatoria, un error en una curva hizo que el
ceutí perdiese mucho tiempo, pasando a octavos en una
discreta vigesimoprimera posición. Aunque consiguió cumplir
el primero de sus objetivos, todo un logro teniendo en
cuenta de su juventud y de que actualmente ocupa el puesto
189 de la clasificación mundial, el ceutí tuvo que hacer
frente en la manga de octavos midiéndose al segundo
clasificado, el decimoquinto y el decimoctavo.
Una cita muy difícil en la que se enfrentó a uno de los
favoritos, el estadounidense Graham Watanabe, que tampoco
pudo llegar a octavos. Aunque Regino puso todo su empeño en
pasar de ronda, finalmente no consiguió ser más rápido que
sus rivales, quedándose a medio camino de hacer historia.
Peor suerte tuvo el catalán, y compañero de selección, Jordi
Font, cuarto en esta misma especialidad en los Juegos de
Turín, y que nada más tomar la salida en la primera de las
mangas clasificatorias, en el primer giro notó un fuerte
dolor en su clavícula derecha, que tenía anteriormente
fracturada, obligándole a abandonar la competición, sin
poder siquiera tomar la salida en la segunda roda, y
quedándose sin opciones de volver a luchar por el podio.
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