Entre informe e informe pasa el tiempo para decidir si,
finalmente, sería prudente parar la desaladora y ahorrar
aprovechando el lleno actual de los pantanos y los aportes
de agua que les llegan desde sus propias cuencas y de los
manantiales. La consejera de Medio Ambiente remite a otro
informe de Acemsa y CHG.
Acensa y la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir
“mantienen reuniones diarias”, ha dicho la consejera de
Medio Ambiente, Yolanda Bel, revestida ayer -además como
cada martes- de portavoz del Gobierno, y se realiza un
seguimiento continuo a los embalses que actualmente se
encuentran al cien por cien de su capacidad. La climatología
sigue siendo favorable.
“Se ha decidido que se elabora un informe que clarifique la
situación de los pantanos, la producción de la desaladora, y
el aporte de los manantiales. El objetivo es que se pueda
determinar en ese informe en qué momento se puede o no
decidir que la desaladora pare”, exlicó Bel.
La desalinizadora ha producido en el último mes una mes de
18.842 metros cúbicos diarios, y el consumo ha bajado con
respecto a 2009 de más de 31.000 metros cúbicos al día a
29.181. Lo que se ha achacado a las mejoras del plan de
sectorización que acometen Acemsa y CHG.
|