sucesos - SÁBADO, 13 DE FEBRERO DE 2010

CEUTA
Cristina Marzán
ceuta@elpueblodeceuta.com

Una de las tesis desglosadas por el abogado Juan Manuel Letrán en el curso de ‘Intervención policial con menores en conflicto con la ley’ fue que el 50% de los reclusos adultos han tenido experiencias en los centros de internamiento de menores ya que de los datos empíricos se desprende que “gran parte de la población penitenciaria inició su vida de delincuente en la infancia en la juventud”. Por ello, los esfuerzos nacionales e internacionales se concentran en la prevención de la delincuencia.

Los datos empíricos han constatado que una gran parte de la población penitenciaria de adultos inició su vida de delincuente en la infancia y en la juventud. De ahí que gran parte de los esfuerzos que se están dedicando desde la comunidad internacional y de todos los que trabajan en el área de Menores, se hayan centrado en la prevención.

Estos fueron algunos de los argumentos desgranados por el abogado Juan Manuel Gómez Beltrán en el curso ‘Intervención policial con menores en conflicto con la ley’, integrado dentro de los planes de formación interadministrativos que patrocina la Ciudad, con un total de 20 horas en las que “se ha intentado desde el punto de vista legislativo y práctico, trabajar sobre esos datos que ha manejado la Ciudad Autónoma en los últimos años desde el juzgado de Menores, la Fiscalía o la Policía Nacional”, informó.

El experto aclaró que el cometido de los profesionales es “intentar, desde la más tierna infancia donde existe alguna posibilidad de reinserción, que no acaben en la redes penitenciarias de adultos”. Por ello, añadió que “45 ó 50% de la población penitenciaria adulta ha tenido experiencias previas con los centros de internamiento de menores”, reveló.

Lo pretendido por dicha acción ha sido el acercamiento de los profesionales a la problemática del menor en las tres vertientes donde puede haber un conflicto con la ley: el menor delincuente, “el más mediático y que mayor repercusión tiene”, el menor desamparado, o el menor víctima del delito.

Además, “se ha realizado un rastreo de investigación de todo lo que en el mundo de organizaciones internacionales, Naciones Unidas y la Comisión Europea se ha dedicado a Ceuta y la problemática del menor en esta ciudad.
 

Contra el orden socioeconómico y lesiones, los delitos juveniles

Hay tres bloques de infracciones cometidas por los menores, partiendo de una gran cifra de delitos ocultos que no se denuncian y permanecen en los márgenes de la delincuencia y no llegan a conocerse. Sin embargo, las estadísticas de los últimos siete años demuestran que están centrado en los delitos contra el orden socioeconómico, es decir, pequeños hurtos y robos, y delitos de lesiones. “Son los dos grandes bloques que acaparan el 80% del trabajo que se está desarrollando y que llega al juzgado de Menores”, argumentó Juan Manuel Gómez Letrán. Con respecto a la reincidencia de los jóvenes y adolescentes de la ciudad autónoma, el abogado puntualizó que “no da tiempo“ pero sí que hay grupos que lejos de socializarse, “acaban entrando en las redes de la delincuencia profesional”, argumentó.