No cabe duda alguna, de que el año
que acaba de empezar, todos somos más pobres, tanto los que
trabajan como los pensionistas, a los cuales con la subida
del IRFP en mayor porcentaje que la subida de porcentaje de
las pensiones, les hace cobrar menos y, por tanto, ser más
pobres que el pasado año.
Pobreza que se acentuará, a la hora de la declaración de la
renta, donde se ha hecho desaparecer esos cuatrocientos
euros de bonificación, teniendo que añadirse a esa perdida
el dinero que no se les ha ingresado a los pensionistas por
el IPC.
Haciendo la suma real, de todos ellos, nos daría una
cantidad que casi igualarían los quinientos euros, lo que,
sin lugar a duda alguna, va a ser a todos esos pensionistas,
quinientos euros más pobres que el año pasado. Una cantidad
nada despreciables y que, tal y como están las cosas, con la
crisis que padecemos, se va a notar muy mucho a la hora del
consumo, puesto que no hablamos de mil ni dos mil los
pensionistas que van a peder esa cantidad, sino de algo más
de un millón de ellos,
A este millón o algo más de pensionistas que perderán esa
cantidad aproximada de poder adquisitivo, habrá que sumarle
todos aquellos cuyas pensiones no están para poder realizar
muchas compras, más bien lo justo y necesario para
sobrevivir.
Lógicamente, al unirse ese millón de pensionistas a estos
últimos, con menos poder adquisitivo que el pasado año,
aquello que podría levantar algo nuestra maltrecha economía,
mediante el consumo, se va a ir al garete. Puesto que los
recién llegados, también mirarán el poder comprar lo
necesario, sin hacer gastos superfluos, porque carecen de
esos quinitos euros para consumir más.
La solución a todos estos problemas, al parecer, la tiene el
“pensionazo”, el recorte del gasto público y la reforma
laboral. Digo yo, que el que la lleva la entiende. Y si el
Gobierno que preside Zapatero, cree que esa son las medidas
a seguir, sus razones tendrá para ello.
Salvo el PSOE que nos gobierna, ningún partido político está
de acuerdo con el “pensionazo” ni, por supuesto, los
sindicatos que ya se han manifestado contra el mismo,
pidiendo que el Parlamento lo tumbe
Esto del “pensionazo” va a traer cola y días de discusión y
acusaciones entre los que están a favor y los están contra
el mismo pues, de momento, no hay mucho acuerdo que digamos,
si no más bien desacuerdos importantes.
Alargar la vida laboral, depende muchísimo del trabajo a
realizar por parte del personal. No es lo mismo, por
supuesto, alargar la vida laboral de un señor que está
tranquilamente sentado ante un ordenador hasta lo sesenta y
siete años, que alargar hasta esa misma edad, a un albañil,
un camarero o un minero.
Cómo un albañil con sesenta y siete año, se va a subir a un
andamio que tenga cinco metros de altura. Y ni te cuento,
serrana del alma mía, que te sirva un camarero con esa edad.
Seguro que la bandeja le tiembla y que, en más de una
ocasión todas las consumiciones que lleve en la bandeja se
vendrán, irremisiblemente, al suelo.
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