Pedro Díaz reconoció ayer que la baja federativa “la podía
esperar por la confianza que me estaba dando el míster, que
no me llevaba ni convocado. Estoy dolido, decepcionado y
jodido, me siento fatal, pero esto es lo que hay y tienes
que ser fuerte”. El ex del Linares no se arrepiente de su
fichaje por la AD Ceuta. “Desde que llegué la directiva me
ha tratado fenomenal, mi mujer, mi niña y yo estamos muy a
gusto en la ciudad porque vivimos muy bien y de la afición
no puedo tener ninguna queja porque siempre me ha mostrado
su cariño. Estoy encantado de haber firmado en el Ceuta y lo
que siento es no haber podido devolver esa confianza al no
jugar lo que hubiera deseado”.
El interior derecho no quería moverse de Ceuta, aunque
estuvo cerca de marcharse al Zamora. “El entrenador (Beto)
estaba loco porque fuera, tampoco quería quedarme medio año
sin jugar y tomé la decisión de marcharme a Zamora, pero
luego surgieron problemas y el fichaje se frustró porque el
jugador al que querían darle la baja se negó a salir... Me
quedo encantado en Ceuta, pero mi situación en el equipo
será muy jodida porque me tocará entrenar aun sabiendo que
no puedo jugar el domingo, pero esto me vendrá bien para mí
de cara al año que viene”.
Pedro Díaz tiene claro que “el míster me trajo aquí por mi
manera de jugar, aunque él puede decir que no he dado el
rendimiento que esperaba. No me he sentido un jugador
importante ni he tenido la confianza que debe tener un
futbolista para ofrecer lo mejor”, concluye.
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